«La gente necesita bailar, es vitamina, es salud, es felicidad, es una terapia para olvidar los problemas». Así lo explica Mara Palacios, una cacereña formada en la afamada Escuela de Flamenco Amor de Dios (Madrid), donde aprendió con Rafael Amargo, Joaquín Cortés, la Truco o María Juncal. Su energía le ha llevado a abrir hace cuatro años en Cáceres la Escuela de Baile Mara Palacios, situada en la avenida de la Bondad, donde ya tiene 150 alumnos que asisten a sus clases de numerosas modalidades de danza (bailes latinos, danza oriental, danza urbana, baile contemporáneo y las distintas disciplinas del ‘dance’ como hip-hop, tic-toc o funky), pero sobre todo flamenco.
De hecho, diez de sus alumnas acaban de clasificarse para la final mundial de flamenco del Global Dance Open Spain, en representación de Cáceres, que tendrá lugar el 20 de julio en Ávila. Participará el grupo cadete, formado por Lucía, Celia, Eva, Rocío, Candela y Nerea, todas entre 9 y 13 años; y el grupo avanzado, integrado por Alba, Natalia, Lidia y Elena, de 19 a 22 años. Presentarán dos coreografías que trabajan intensamente en la academia durante estas semanas previas.
En auge
«El flamenco tiene mucho tirón pese a ser una modalidad muy difícil, con bastante técnica de pie, cuerpo y brazos», afirma Mara Palacios, que ha intervenido incluso en el filme ‘Lola, la película’, concretamente en la parte en la que Lola Flores era pequeña y bailaba sevillanas en su escuela. Asegura que cada año llegan más alumnas (el primer chico lo hará el próximo curso), y que el flamenco es una pasión que engancha al que aprende a disfrutarlo.
En la academia se respira mucha expectación por participar en el mundial. «Cada grupo obtendrá sus puntuaciones y nosotros estamos esforzándonos en el día a día para lograr el primer puesto. Vamos a por ello, sabemos que irán participantes de mucha calidad, pero hay que intentarlo», subraya Mara Palacios. En cualquier caso, acuden dispuestas a disfrutar «y sobre todo a aprender de una experiencia tan enriquecedora».
