Pedaleando juntos llegamos más lejos. Esa es la premisa con la que José Guardia, presidente de la Asociación Necesidades Sin Fronteras, inició el camino solidario que le está haciendo recorrer España de punta a punta. Desde Albolote, su localidad natal, hasta Santiago de Compostela realizará este trayecto, que lo han llamado ‘Bicidarios’, acompañado de Manuel Casado.
1.139 kilómetros recorrerán encima de sus bicicletas, divididos en 23 etapas y dos días de descanso. Tras ellos, un coche escoba «sin el que nada de lo que estamos haciendo sería posible», según cuenta Guardia.
Zalamea de la Serena, Oliva de Mérida, Cáceres, Cañaveral y Plasencia serán las localidades de la región en las que están realizando paradas para tratar de concienciar a la gente y conseguir su colaboración para los proyectos que la fundación está llevando a cabo.
El presidente especifica que tienen tres propósitos que cubrir: el primero es un colegio en Togo; el segundo es la rehabilitación de un hospital en Senegal; y el tercero es la continua ayuda que realizan en su provincia, Granada, donde aportan comida a 35 familias (más de 200 personas).
Para colaborar con ‘Bicidarios’, colocan un estand en los pueblos en los que realizan paradas para vender merchandising de su recorrido. Camisetas, bolsos, gorras y lotería es lo que tratan de vender para conseguir dinero que destinarán íntegramente a sus proyectos.
José Guardia cuenta que «están realizando algo que hace 12 meses vislumbrábamos como algo casi imposible, no había cogido una bicicleta en mi vida y ya tengo 67 años». Destaca también la ayuda de su compañero de viaje, al que considera un «gregario de lujo» y agradece lo bien que «está funcionando lo que estamos organizando, se está vendiendo mucho y nos están donando bastante dinero».
Regalos al alcalde
El alcalde de Cáceres, Rafael Mateos, les recibió en la plaza Mayor de la ciudad y charló con los protagonistas antes de que le hicieran varios regalos: una camiseta de la asociación con el lema «las necesidades no tienen fronteras» y otro presente que le ha hecho llegar el ayuntamiento de Albolote.
Mateos quiso agradecer el esfuerzo que están realizando: «Cáceres es una ciudad solidaria y les abre los brazos para colaborar en la su experiencia para concienciar, ayudar a los demás y colaborar con sus proyectos en distintos países».
