Un trabajador del área de servicio El gallo resultó herido con policontusiones en un robo de combustible que se produjo en la noche del pasado lunes tras atropellarle un vehículo. El joven, de 33 años, es natural de Cáceres aunque reside en Casar de Cáceres, y recibió asistencia sanitaria en el lugar del suceso. Posteriormente fue trasladado al hospital Universitario, donde pasó la noche en observación y recibió el alta durante la mañana del martes.
Según ha indicado el afectado a este diario, que ha preferido no identificarse, tiene una herida importante a la altura del codo de su brazo derecho y varias magulladuras por el cuerpo. Ha comentado que "nos tienen dicho que en situaciones de robo no nos pongamos en peligro, pero cuando ves que está ocurriendo algo así tratas de evitarlo como puedes".
Los hechos
El suceso quedó grabado en las cámaras de seguridad de la gasolinera Repsol y aconteció minutos antes de las 22.30 horas, cuando un turismo negro de la marca SEAT paró en uno de los dispensadores de gasoil. Del vehículo se bajó el copiloto, un varón vestido de negro y que se dirigió al interior del establecimiento para pedir a una empleada que le echase combustible.
Como se puede apreciar en las imágenes de la cámara de seguridad, la trabajadora, tras colocar el surtidor en el depósito, se dispuso a avisar a su compañero que estaba en la caja a através de un 'walkie-talkie' porque no se fiaba de las personas a las que estaba atendiendo.
Al terminar de echar la gasolina, el empleado que estaba en el interior salió a la puerta para ver si era necesaria su ayuda. El copiloto, que se había mantenido fuera del coche durante el transcurso de los hechos entró al vehículo y emprendió la huida junto al conductor, que en ningún momento se baja del coche, ante la oposición de los empleados.
Cuando el coche emprende su marcha, el varón que resultó herido trató de poner un cono en el camino del vehículo para intentar evitar que escapasen. En el intento, él también se puso delante y fue arrollado, además de recibir un golpe de la puerta trasera derecha que la otra empleada intenta abrir para que el vehículo frene.
Desde la empresa encargada de la gestión del área de servicio ubicada en el término de Casar de Cáceres han interpuesto una denuncia contra los que dirigían el coche y, según informa la Guardia Civil, "estamos tratando de identificar a los culpables del atropello".