Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

La mirada

Antonio Pariente, cura de Cáceres: "Una iglesia sinodal"

Francisco lo consideraba como una de las mayores tentaciones de la Iglesia actual, definiendolo como una “perversión del ministerio”, que genera autoritarismo y pasividad en los fieles

El Papa León XIV.

El Papa León XIV. / El Periódico Extremadura

Antonio Pariente

Antonio Pariente

Cáceres

Una de las cosas de la que nos acusan algunos interesados en las cuestiones eclesiales es de que muchas veces hablamos de cosas que los que nos escuchan no entienden ni por asomo. Después de explicarles la cuestión, y pensando en concreto en mis feligreses, es posible que mas de uno me cuestionara “bueno, pero eso de iglesia sinodal ¿qué es?”. Y yo pensaba que lo había explicado perfectamente.

¡Ay madre¡ estuve doce años en el seminario, os puedo decir que en esos doce años, nunca oí hablar de una iglesia sinodal. Sí escuché que la Iglesia es “una, santa, católica y apostólica”. Pasé otros cinco en Salamanca y y nada de nada, es verdad que no estuve en la facultad de teología. Estuve de formador en el Seminario hasta el 2003, es posible que presentara una iglesia con características que eran sinodales, pero...no usé ese nombre. Los primeros años en San Blas no recuerdo que fuera una preocupación básica.

Pero, ¿entonces que pasa aquí?, pues que vino el papa Loco de Dios en el 2013, y comienza decir que la Iglesia es sinodal, no porque él lo diga sino porque siempre lo ha sido. ¿?. Y comienza a hacer gestos que lo demuestren, convoca a los miles de millones de cristianos, y les pide que den su opinión sobre cosas, que quiere conocer lo que piensan, y sigue con las etapas siguientes de su proyecto. Pero, ocurre que, cuando estábamos aprendiendo, se muere en abril de 2025 y le quedaban unos pasos por dar. El nuevo papa dice que va a seguir el camino y en ello estamos.

Don Jesús dijo el pasado domingo en la inauguración del curso pastoral 25/26 que en nuestra Diócesis este curso ya hay que poner en marcha una serie de gestos que demuestren que estamos convencidos de esta realidad. Habrá que intentarlo.

Hacer las cosas en la Iglesia con el espíritu de ser una iglesia sinodal, es dar un giro de ciento ochenta grados a las formas de como lo hacemos ahora. Y esto es mucho decir.

Estoy de acuerdo con los que piensan el gran enemigo de la sinodalidad es el clericalismo. Francisco lo consideraba como una de las mayores tentaciones de la Iglesia actual, definiendolo como una “perversión del ministerio”, que genera autoritarismo y pasividad en los fieles.

No os preocupéis, volveremos con lo que son las características de una Iglesia sinodal, quizá debería haber empezado por ahí. Pero como os digo muchas veces, es lo que hay.

Un saludo a todos.

Tracking Pixel Contents