Los monjes polacos de la orden de San Pablo (primer eremita) iniciarán vida monástica en Yuste el próximo día 10 de marzo, según ha adelantado a este diario el fraile, Rafael Zawada, que junto con el también religioso de la misma orden, Pablo Stepkowski, se ocuparán de la vida monástica del cenobio verato, tras la marcha de los Jerónimos, ocurrida en diciembre de 2009.

La llegada de los nuevos monjes al Real Monasterio de Yuste arrancará "con una misa especial" a la que asistirán, entre otros, el cardenal Antonio María Rouco Varela, el obispo de la diócesis de Plasencia, Amadeo Rodríguez, y otros representantes de la Iglesia, junto con diversas autoridades civiles.

Por otra parte, Zawada confesó que en Yuste "quieren vivir y restaurar la vida monástica". En cuanto al número de monjes que llegarán al cenobio donde murió Carlos V, explicó que "ahora somos dos, pero en el futuro tenemos esperanza de que venga otro monje en verano. El monasterio --nuestra casa--, está preparada para siete personas".

Por otra parte, reconoció que ya tienen contacto con La Vera, debido a que desde hace algún tiempo se encuentran al frente de la parroquia de Cuacos. Así pues en las próximas semanas el Real Monasterio de Yuste, donde murió el Emperador Carlos V, recobrará el silencio sonoro que durante varias centurias caracterizó a aquel lugar emblemático, aunque no de forma continuada, ya que tras el fallecimiento del monarca, el monasterio recuperó de nuevo su único fin, hasta que la ocupación francesa y diversas desamortizaciones convirtieron a Yuste en una ruina.

Por último, los religiosos eremitas vienen de Polonia, donde la Orden de San Pablo ha florecido, tras hacerse cargo en el siglo XIV de custodiar en Czestochowa a la Virgen de Jasna Gora.