Si Collado de la Vera puede presumir de sus rincones únicos o del paraje natural Las Pilas, también lo puede hacer de su horno comunal con más de 300 años de historia. Y es que no hay lugar mejor para hacer pan natural y los dulces típicos de la localidad con un sabor especial e inconfundible gracias a la historia y los del horno en el que se hacen.

Tras estar cerrado y sin usar durante más de 70, desde el ayuntamiento se propuso la recuperación y rehabilitación de este bien para uso y disfrute de los vecinos y visitantes. «En el 2008 lo abrimos, vimos como estaba y un año después acometimos la rehabilitación de la estructura, la fachada y el tejado, quedando reinaugurado el 5 de octubre de 2009», señalaba Montse Fernández, alcaldesa de Collado de la Vera.

La situación en la que se encontraba el horno era «de trastero, de almacén» con lo que desde el consistorio consiguieron recuperarlo «ya que es algo único y que no en muchos sitios existe un horno como este, que además se encuentra en su estado natural, tal y como lo hicieron hace más de 300 años», explicaba la alcaldesa.

Un horno comunal

El principal uso del horno se lo dan los vecinos de Collado de la Vera, quienes hacen panes y dulces típicos del municipio. «Nosotros no ponemos pegas a su uso, siempre que sea con responsabilidad, y además también hacemos talleres con los jóvenes para que conozcan la historia de la localidad y cómo se hacía y se hace el pan y los dulces», subrayaba Montse.

Pero además de contar con el horno tradicional, en el mismo edificio, en la planta de arriba, hay un museo del pan en el que se repasa toda la historia sobre el plan, utensilios, ingredientes y aparatos que se utilizan para su elaboración. Así, este museo es un recurso más que ofrece el municipio a los visitantes, que está en el centro de la localidad y que es visitable durante todo el año.