La historia de Yasmin, como se la conoce ya en el refugio de animales Turgalium, podría haber sido bastante más trágica de no ser por un matrimonio que paseaba cerca del pozo de El Resbaladero, en Huertas de Ánimas, la tarde del pasado viernes.

Según cuenta Mario Gilabert, responsable de la protectora trujillana, estas personas escucharon los aullidos del animal y se acercaron hasta el pozo, donde pudieron ver a la perra intentando salir. «Avisaron a la Policía Local y estos nos avisaron a nosotros. Cuando acudimos al lugar, la perra, por suerte, ya había sido rescatada», cuenta Gilabert.

Y es que, a pesar de hacer las llamadas pertinentes, las dos personas pudieron hacerse con una cuerda y un cubo con los que llegar hasta Yasmin, que se subió a ellos, logrando salvarse.

Todo apunta a que alguien quiso deshacerse de la perra tirándola al pozo, cuya puerta estaba cerrada, pero sin candado, lo que hace imposible que el animal llegara a caerse por accidente o a acceder a él por sí solo. «Esta es la hipótesis que barajamos tanto la Policía Local como el refugio, además del Seprona, que fue avisado posteriormente y que ya está al tanto de la situación», apunta este responsable.

En cualquier caso, las autoridades y el refugio de animales apelan a la responsabilidad ciudadana para averiguar quién pudo hacerlo, «ya que se considera un delito de maltrato animal contra el que tenemos que luchar entre todos», subraya Gilabert.