La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha encargado un estudio sobre las aves y otras especies de fauna en las plantas fotovoltaicas de La Magascona y Trujillo III, y cómo afectarían las placas solares a las especies, determinado que «los grandes parques solares pueden ser una oportunidad para la biodiversidad».
El estudio analiza la biodiversidad de aves y otras especies de fauna en varias instalaciones solares fotovoltaicas, entre ellas, estas dos situadas en la provincia cacereña. Estudio que determina que, una vez puesta en marcha una instalación de este tipo, «su espacio resulta apto para la presencia de un buen número de especies de aves, de invertebrados y de otros vertebrados».
Además, «puede albergar especies de interés, facilitando un espacio seguro para su reproducción y contribuir, por tanto, a la protección y conservación de especies, incluso de algunas protegidas».
Siempre que la selección del emplazamiento «sea la adecuada, evitando aquellos con valor intrínseco ambiental, y que la gestión de la fauna se haga de forma sostenible», matizan desde la UNEF.
Superficies cada vez más extensas
El informe reconoce que las plantas solares fotovoltaicas sobre suelo «ocupan cada vez superficies más extensas, modificando las condiciones naturales y de uso del territorio». Y que «estos cambios dan lugar, a su vez, a repercusiones sobre la biodiversidad y, en particular, sobre los vertebrados».
También apunta a que durante la fase de construcción, la intensidad de las labores constructivas y de la presencia de personal y maquinaria generan una «alteración sustancial, aunque temporal, de las condiciones de habitabilidad de los emplazamientos».
Pero que, toda vez superada esa fase «se recuperan unas condiciones de tranquilidad y habitabilidad que facilitarán la instalación de una comunidad faunística adaptada a las nuevas condiciones».
Especies de valor
Del estudio de la zona en la provincia se desprende la observación, tanto dentro como fuera de la planta, de un número alto y similar de especies de valor o interés, incluidas algunas aves con relevancia desde el punto de vista de la conservación.
Destaca la presencia en la planta fotovoltaica de algunas aves esteparias como el alcaraván, o de rapaces, como el mochuelo y el cernícalo primilla. La presencia de carraca también es a destacar, tanto dentro como fuera de la planta.
En el exterior de la misma se aprecia una mayor presencia de especies acuáticas singulares, como la espátula, asociada a las charcas existentes en la zona.
Por último, fuera de la planta fotovoltaica se han observado avutardas, sisones y aguiluchos cenizos, especies todas ellas asociadas a medios esteparios en buen estado de conservación.
