Miajadas es una caja de sorpresas. Pasear por la calle Real nos puede deparar una agradable impresión adentrándonos en La Trastería de Luzía, una bonita tienda de antigüedades y decoración con piezas de diferentes épocas. Entrar aquí es un viaje en el tiempo. El negocio lo regenta Mariluz Tello desde hace seis años, no hay mucho hueco, literalmente, para un artículo más. Por el momento, sus tesoros van desde aperos de labranza, mobiliario, espejos, menaje de mesa, carteles taurinos, utensilios de matanzas, relojes de pared, radios, cámara de fotos, maletas, cestas, cuadros religiosos, muñecas…«Últimamente los muebles con estética retro están teniendo bastante éxito», manifiesta la propietaria.

Todo tipo de reliquias. ALBERTO MANZANO

Para Mariluz, lo mejor de su trabajo es poder compartir con los clientes su pasión por las antigüedades. ¿Qué es lo que más demanda tiene por parte del público? «Las mesillas. Sin duda. De todas formas, hay que destacar que en Miajadas y en la provincia de Cáceres hay mucha tradición de compra de antigüedades, se nota que los extremeños tenemos buen gusto, desde luego, el mercado se está moviendo de forma positiva entre particulares y casas rurales», explica a El Periódico Extremadura.

Segunda, tercera e infinitas vidas son las que tienen numerosos de los objetos que están a la venta. Conversamos con ella en su local cuando un cliente se interesa por una lámpara. Mariluz nos deja un instante para atenderlo. ¿Buscas vintage? En Miajadas está.