Desde 1978. El Periódico Extremadura visita uno de los templos culinarios de Malpartida de Cáceres. La segunda generación tomó las riendas para mantener la esencia familiar del bar Los Puri, ubicado en la plaza Mayor. Ahora es Pedro José Domínguez el que capitanea este negocio que abrieron en el pueblo su padre y su tío (José y Paco). Muchas recetas las heredó de ellos. Aquí los desayunos, pinchos, comidas, cenas… sí son un ritual, un proceso en el que siempre hay una sonrisa predispuesta por los camareros y cocineros, un buen rollo que se genera desde que los clientes atraviesan el umbral de la puerta del emblemático local.

Los callos, morcillas, magro con tomate, mollejas, pinchos morunos o morros ocupan un lugar destacado de su amplísima carta de platos y raciones. Los Puri es un lugar de encuentro para los amantes de estos manjares que recuerdan al guiso de las abuelas, al de ‘toma pan y moja’, pero hacerlo bien, no es tarea fácil. Requieren una paciente y lenta elaboración para que queden impecables. «Unos callos, pinchos morunos o morcillas bien hechos gustan tanto a los mayores como a los jóvenes. Porque no hay nada mejor que compartirlos con una buena compañía. Y por supuesto pringar el pan. Que la gente deje los platos limpios, es la mejor señal de que les ha gustado», manifiesta Domínguez.

Asimismo hay una muy buena opción para degustar la cocina extremeña más auténtica. Ibéricos, carrilleras, solomillos, rabo de toro, chanfaina, elaboraciones a la brasa o con patatera... son esenciales para entender la gastronomía de esta provincia. Todos ellos están presentes en la carta de este establecimiento, al igual que el pulpo a la gallega o bacalao al pil pil. La barra de este bar cuenta con un gran reconocimiento del mismo modo que su particular pintxo-pote (bebida más aperitivo) de los viernes por la noche, que consiste en servir tapas más especiales como un bocadillo de calamares, hamburguesas, montaditos, huevos fritos... Además del ambiente de bar de toda la vida Los Puri sigue cuidando con detalle y mimo cuestiones como que la caña esté bien tirada o la decoración