Desestiman la querella contra el alcalde de Guadalupe por irregularidades en las terrazas

La Audiencia Provincial de Cáceres ha desestimado la querella interpuesta contra el alcalde de Guadalupe, Felipe Sánchez Barba, por supuesta prevaricación administrativa en el ‘caso de las terrazas’, que provocó un gran revuelo en la Puebla en marzo de este año, cuando el regidor dio la orden de retirar temporalmente todos los veladores del municipio tras formalizarse la querella de un vecino por supuestas irregularidades en la normativa municipal. 

El auto de la Audiencia Provincial es firme y da respuesta a un recurso interpuesto por la parte demandante tras la resolución del Juzgado de Instrucción de Logrosán, confirma el fallo en su integridad e indica al demandante (un hostelero del municipio «que tiene una cierta discapacidad o minusvalía y que, a su vez, sería dueño o dispondría de la explotación de un local público» en la plaza de Guadalupe) que puede hacer uso de la vía judicial contenciosa-administrativa, pero «ya en ámbitos jurídicos ajenos a la Jurisdicción penal en la que ahora nos encontramos, pues sus pretensiones exceden de esta». Además, le impone el abono de las costas judiciales.

Incumplimiento de la Ley de Accesibilidad

El hostelero demandó por el incumplimiento de la Ley de Accesibilidad. El pleno municipal aprobó en 2021 una inversión para llevar a cabo la accesibilidad que requiere la plaza de Santa María, pendiente de ejecutarse. 

El pleno municipal aprobó en 2021 una inversión para llevar a cabo la accesibilidad que requiere la plaza de Santa María, pendiente de ejecutarse

Sin dolo o intencionalidad

No obstante, el auto señala que las resoluciones de alcaldía a la hora de renovar y/o conceder las instalaciones de las terrazas «siempre han contado con el apoyo de los correspondientes informe técnicos del ayuntamiento». Y subraya que tampoco «puede considerarse que sea una decisión unilateral y espontánea» del regidor. «Con lo cual, su intervención en calidad de alcalde ni siquiera reviste carácter intencionado o doloso alguno». Y concluye que la conducta de Sánchez Barba «no constituiría prevaricación penal alguna, pues en las diferentes resoluciones de alcaldía, se ha seguido la ordenanza municipal y actuado en conformidad con su contenido e interpretación; siempre avalado por los informes técnicos municipales en cada caso particular». 

El auto concluye que la conducta de Sánchez Barba «no constituiría prevaricación penal alguna, pues en las diferentes resoluciones de alcaldía se ha seguido la ordenanza municipal»

Y desgrana el auto que se observa cómo las diferentes solicitudes de los locales públicos abiertos en la plaza para «instalar, ampliar o modificar sus terrazas o bien sus elementos auxiliares se han ido produciendo a lo largo de los años 2016, 2017, 2018, 2019 y 2021; son inicialmente presentadas ante el ayuntamiento, admitidas a trámite y tras la preceptiva emisión, en cada una de las solicitudes, del correspondiente informe positivo de los servicios técnicos del ayuntamiento».

La querella provocó que el alcalde retirase durante ocho días las terrazas en marzo, con gran malestar entre el sector hostelero. Sánchez Barba alegó entonces que se quitaban porque «no tienen la licencia de renovación. Todas caducaron. Estamos en trámites de concesión y no se pueden mantener las terrazas si en ese permiso. Es un asunto que se ha judicializado, y yo tengo que actuar en consecuencia», señaló el regidor de la Puebla a Efe a mediados de marzo de 2002. Ya el 21 de marzo, confirmaba a el Periódico Extremadura que se estaban notificando las licencias de los veladores. 

El regidor se comprometió entonces (en la reunión que mantuvo con los grupos municipales) a agilizar la tramitación de las licencias, modificar la ordenanza municipal reguladora si fuese necesario y trabajar en la mejora de la urbanización de algunas calles céntricas para facilitar la movilidad.