¿Hay que separar al artista de su obra? ¿Se debe juzgar y señalar a alguien que no está condenado judicialmente? Son algunas de las preguntas que muchos se han planteado a raíz de la decisión por parte de la Junta de impedir a la Fundación Orquesta de Extremadura (OEx) actuar junto al tenor Plácido Domingo, acusado en 2019 de acoso sexual por más de una veintena de mujeres. La actuación, que sigue programada para el próximo 25 de septiembre en el Teatro Romano de Mérida, pondrá el colofón a la sexta edición del Stone&Music Festival, un certamen de música privado que cuenta con patrocinios publicitarios por parte del Ejecutivo regional y el ayuntamiento emeritense.

También, el Consejo de Gobierno de la Junta decidió el sábado que desde ahora, la programación de cualquier concierto, festival o evento que cuente con financiación pública deberá ser aprobada con anterioridad a la concesión del patrocinio.

La Junta se reafirma

Como era de esperar, estos hechos no han pasado desapercibidos y las reacciones tampoco se han hecho esperar. La consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Nuria Flores, manifestó ayer que esta decisión es «puramente ética», ya que «este equipo de Gobierno tiene un firme compromiso para erradicar la violencia machista». Aunque durante las preguntas de los medios en rueda de prensa, Flores añadió que «el promotor es libre de traer a Plácido Domingo» porque es un evento «privado».

Asimismo, sobre este asunto, la consejera defendió la libertad de que «una orquesta como la Orquesta de Extremadura que depende de la consejería, es decir, son funcionarios públicos, no actúe con un artista que públicamente ha admitido que abusó de su poder».

Por su parte, la promotora confirmó el domingo en un comunicado que el concierto seguiría adelante y que la Orquesta Filarmónica de España será la agrupación musical que finalmente acompañará al intérprete. «La decisión ha sido un contratiempo más de los muchos que hay que superar durante la organización de un festival, pero fundamentalmente para nosotros tiene un carácter más emocional porque nos hubiera gustado que fuera nuestra orquesta, la orquesta de todos los extremeños, la que acompañase a Domingo», explicó Carlos Lobo, promotor del festival. Además, recordó que «la Orquesta de Extremadura siempre ha estado presente en el festival dando el contrapunto musical a artistas como Ainhoa Arteta, Il Divo o Raphael».

Divergencia de opiniones

Los partidos políticos de la región también han expresado su visión sobre lo sucedido. El PSOE extremeño ha considerado que «algo estamos haciendo mal en esta sociedad» cuando hay «gente que aplaude a alguien que ha acosado a mujeres». De esta manera, reitera la decisión de que la Fundación Orquesta de Extremadura no actúe con Plácido Domingo. «No es una cuestión de presunción inocencia», pues el tenor «ha confesado, no se le acusa», afirmó en rueda de prensa el socialista Juan Antonio González, al ser preguntado por esta cuestión.

Por otro lado, José Antonio Monago, el presidente del Partido Popular extremeño, defendió la presunción de inocencia del tenor respondiendo así a la decisión tomada por el gobierno de Fernández-Vara. «Cuando se trata de condenar a alguien sin condena son los primeros. Cuando se trata de condenar a Castro y a su grupo (por la situación en Cuba), qué silencio más atronador», aseguró.

La portavoz de Podemos Extremadura, Mavi Mata, pidió ayer que se retiren todos los patrocinios públicos al Stone & Music Festival, tanto por parte de la Junta como del Ayuntamiento de Mérida señalando que «la lucha contra las violencias machistas desde las instituciones públicas debe ser incuestionable». Desde Ciudadanos Extremadura han mostrado solidaridad con las mujeres víctimas de acoso aunque David Salazar, coordinador del grupo, ha pedido que «no se puede hacer demagogia ni política con temas tan serios». 

Pese a la controversia, 30 años después, Plácido Domingo regresará a Mérida, donde actuó por primera vez en 1991 junto a Rostropovich y la orquesta del Teatro Kirov de Leningrado, aunque esta vez envuelto en la polémica de acoso sexual que, pese a no afectar al ritmo de la venta de entradas, sigue repercutiendo en la placidez de su vida profesional. 

Las entradas, entre 90 y 340 euros, se venden a buen ritmo

Al margen de la polémica, la compra de entradas para asistir al concierto de Plácido Domingo en el Teatro Romano de Mérida el próximo mes de septiembre, «está siendo el habitual aunque aún no tenemos cifras oficiales», afirman fuente s del Stone&Music Festival. En cuanto a los precios, las más baratas, las de la Cavea Media o «gallinero», cuestan 90 euros, las de la Orchestra llegan a los 340 euros y el resto oscilan entre 160 y 190 euros. La compra de tickets comenzó ayer a primera hora de la mañana y según se puede comprobar en la web del festival ya se han vendido dos tercios de las más caras. En cuanto al resto de localidades del teatro, se encuentran en torno al 30%.