«La poesía es la sombra de la memoria, pero será materia del olvido». Con esta cita de José Emilio Pacheco inicia Ángel Campos Pámpano (San Vicente de Alcántara, 1957 - Badajoz, 2008), Materia del olvido, un librito con cordel de lana azul y portada de Luis Nicolás ‘Negrín’. Se publicó en 1986 dentro de la caja verde de la Colección Arco Iris. Se compone de siete dísticos, creaciones poéticas de dos versos que expresan un concepto completo. Fueron en parte premonitorios de lo que sería su obra.

Materia del olvido, del sello editorial Vberitas, es un librito enorme en su pretensión poética al depurar la intensidad del lenguaje en la breve extensión de un microrrelato, una greguería o un aforismo. Y es la obra elegida por el poeta extremeño Carlos Medrano, que actualmente reside en Artá (Mallorca), para dar forma a su propuesta de homenaje a Ángel Campos en el 65º aniversario de su nacimiento y en el 14º de su muerte.

Así, ha salido a la luz el volumen titulado Recobrada memoria, donde ha planteado a cada uno de los participantes un dístico sobre el autor sanvicenteño o en torno a alguno de sus textos.

Además, Medrano reedita Materia del olvido en su integridad al incluirlo en esta Recobrada memoria.

Objeto de colección

En el texto de presentación de esta obra homenaje, Medrano define así a Ángel Campos: «Su labor no fue sólo la de aportar una obra literaria propia a la espera de la mejor fortuna posible sino la incansable manera de concebir su papel de lector y creador inculcándolo de un modo exponencial en todas sus tareas».

De este modo, Recobrada memoria ha convocado «en torno a la literatura y a la amistad a un buen grupo de aquellos amigos y escritores de nuestra tierra que lo trataron o de los que por edad llegaron a él leyéndolo y han querido participar. A ellos se unen algunos autores más en representación de la inmensa capacidad de Ángel de conocer y relacionarse con todos los que escribían a un lado y otro de Portugal y España», manifiesta también el coordinador de la obra.

En este libro se dan sincronías y algunos encuentros felices para dar vida a un trabajo de gusto exquisito convertido ya en objeto de colección

Uno de esos encuentros está en el dibujo de la cubierta, de J. Ricardo Montaña, que muestra una naranja abierta. Esta ilustración parte de una curiosidad: Ángel Campos solía poner una o dos naranjas en su equipaje cuando viajaba, y llevaba en los bolsillos un trozo de cáscara a modo de amuleto o talismán por su aroma. Curiosamente, Carmen Fernández, madre de sus dos hijas en común, Paula y Ángela, cierran el libro con la traducción, de las tres, del poema La naranja robada, de Brian Patten.

Otro encuentro feliz es la presencia en el volumen del exfutbolista y novelista Manuel Vicente González, conocido como ‘Cerebro’ -‘Celebro’ en el campo de juego-, quien creó con Ángel Campos y Pedro Almoril el sello Del Oeste Ediciones, que en sus inicios publicó Entre líneas, de Luis Landero, que es el único participante de Recobrada memoria que no aporta un dístico, pero a cambio narra cómo se conocieron y cómo lo convenció para que escribiera Entre líneas.

Los versos fluyen en este volumen con una gran variedad de propuestas, estéticas o concepciones poéticas. Los acompañan seis obras plásticas como La Rabaza, de Javier Fernández de Molina o El cielo casi, de José Manuel Sánchez Paulete. Hay aportaciones también de Hilario Bravo, Antonio Gómez, Laura Covarsí y Germán Grau.

Portada del libro.

Portada del libro.

Los autores de ‘Recobrada Memoria’

Los autores que participan en ‘Recobrada Memoria’ son: Pureza Canelo, Pablo Guerrero, José Antonio Zambrano, José María Bermejo, Perfecto Cuadrado, Juan Ricardo Montaña, José Luis García Martín, Gonzalo Hidalgo Bayal, Jean Gabriel Cosculluela, Ezequías Blanco, Manuel Vicente González, Alfonso Alegre Heitzman, Santos Domínguez, Francisca Díaz Fernández, Fernando León, Luciano Feria, Tomás Sánchez Santiago, Basilio Sánchez, José Luis Bernal Salgado, Jesús García Calderón, Elías Moro, Álvaro Valverde, María Rosa Vicente, José María Lama, Carlos Medrano, Serafín Portillo, Juan Manuel Barrado, Miguel Ángel Lama, Javier Alcaíns, María José Flores, Ada Salas, Luis Sáez Delgado, Irene Sánchez Carrón, Diego Fernández Sosa, Javier Morales Ortiz, Julián Quirós, Antonio Sáez Delgado, Suso Díaz, Antonio Reseco, Juan Ramón Santos, Mario Lourtau, José Manuel Díez, Julio César Galán, Luis Leal, Eva María Romero Rivero, Isabel Jimeno, Paula Campos Fernández, Carlos García Mera, Ángela Campos Fernández, Guadalupe Villarreal y Anónimo de Yuste. Estos dos últimos, autores apócrifos extraídos del libro Cancionero doble, son en realidad Juan Manuel Rozas, fallecido dos años antes que Ángel Campos, como cuenta Carlos Medrano en su introducción.


Un enamorado de Lisboa

Ángel Campos, enamorado de Portugal, de Lisboa (su Ciudad blanca), de su cultura y literatura, fue el introductor de Pessoa y el resto de escritores del país hermano, como lector, traductor y profesor. Fundó la revista Espacio/Espaço Escrito con Álvaro Valverde y Diego Doncel, la publicación Hablar/Falar de Poesía y el Aula de Poesía Enrique Díez-Canedo en Badajoz, que más tarde se extendió por otras ciudades extremeñas. Fue activista en diferentes ámbitos culturales y colaborador del programa de radio Ático, en Radio Popular de Badajoz, a principios de los años ochenta, donde él y Santiago Méndez dedicaron programas especiales a Pessoa cuando en España era un desconocido.

Como poeta, Campos es autor de Materia del olvido, La ciudad blanca, La voz en espiral, Siquiera este refugio, El cielo casi, La semilla de la nieve, Caligrafías, con Javier Fernández de Molina, El cielo sobre Berlín, con Luis Costillo, Cercano a lo que importa, antología publicada cuatro años después de fallecer, y Abierto al aire, antología de poetas extremeños.