Convencidos de la permanencia en la LEB Oro. Lo apuntado la pasada semana por el pívot australiano Dan Trist tiene continuación en sus compañeros cuando restan dos encuentros para la finalización de la liga regular. Los jugadores del Cáceres Patrimonio dicen estar seguros del éxito. Llega el momento definitivo, en el que espera, tras el juicio final, el respiro o las catacumbas de la LEB Plata.

El mensaje se impone con claridad. Así, al menos, lo apuntaron ayer los jugadores en manifiestaciones a este diario, que recogió seis opiniones de los protagonistas, todas ellas de un marcado perfil positivo. También se apela al factor afición para ayudar a la causa en el momento más determinante de la historia del club de los últimos años.

El argumento que esgrimen todos es tan doble como evidente: el equipo de Roberto Blanco depende de sí mismo para lograr la salvación: venciendo en los dos choques (Granada el viernes y Canoe una semana después) se habrá cumplido con la meta. No hay que pensar, se argumenta, en otras combinaciones que no sea precisamente esa, la más directa a la meta.

Para el base Guille Corrales, está claro que la presión no es precisamente del Cáceres, sino del resto de compañeros de viaje en la pugna competitiva. «La salvación la veo en nuestra mano, por supuesto. Ahora mismo tenemos una posición privilegiada que los otros tres equipos con los que nos estamos jugando la permanencia no tienen» y añade una obviedad para ratificar la coyuntura: «estamos fuera del descenso y ellos no de cara a estas dos jornadas que quedan», aduce.

El alero balcánico Niko Rakocevic también atisba un buen horizonte apelando a la confianza del colectivo. «Veo bastante factible la permanencia. Es un punto muy positivo el hecho de que dependemos de nosotros mismos. El partido contra el Granada lo tenemos que sacar sí o sí y luego ir a la pista del Canoe con todas las ganas y rematar ahí en Madrid», argumenta.

Para Dani Martínez, a pesar de que hay que apelar a la cautela, lo importante es ser optimista y estar centrados en el objetivo. «A pesar de estar fuera del descenso ahora mismo, la salvación la veremos de aquí a dos semanas». Para el polivante jugador catalán, hay que ser prudentes y estar concentrados en el reto.

El pívot Johan Kody va por la misma línea. «La salvación la veo muy a tiro porque dependemos de nosotros mismos. Ganando los dos partidos la tendremos. Eso es lo que hemos de tener en cuenta», comentó.

Mientras tanto, el base polaco Andy Mazurczak es quizá el más radical a la hora de mostrar la perspectiva del éxito. «Tenemos el control de la situación. Vamos a ganar los dos partidos y estaremos salvados», comenta.

El capitán verdinegro, el alero Luis Parejo, apela al factor cancha en el encuentro más próximo. «La salvación está en nuestras manos. Si volvemos a tener esa conexión entre afición y equipo somos imparables», recalca el alero almeriense.

Precisamente reunir a un gran número de seguidores será uno de los objetivos de la entidad verdinegra, que espera que en el momento definitivo se registre una gran entrada de público el viernes a partir de las 21.00 horas ante el Granada. A ello ayudarán diferentes iniciativas que se anunciarán en las próximas horas. Habrá diferentes promociones, con el abonado como principal aliado en la tarea de crear el mejor caldo de cultivo ante un rival que llegará también con una urgencia de victoria porque se juega el factor cancha en los playoff por el título.

Además, será el día de la cantera, lo que también contribuirá a que haya más gente en las gradas del Multiusos, como suele suceder cada año. La trascendencia del duelo queda fuera de toda duda y eso está asumido por los fieles del proyecto. Es el momento de la verdad del Cáceres en la LEB Oro. De momento queda lejos el encuentro de Madrid ante el Canoe porque, aunque podría valer un solo triunfo, se piensa que ganar el viernes es prioridad.