Mikel Landa (Movistar), quinto en la general del Giro a 3.15 de su compañero ecuatoriano Richard Carapaz, espera «seguir creciendo» en la semana decisiva y advirtió de que el rival a seguir desde este martes en las rampas del Mortirolo será el italiano Vincenzo Nibali.

«Vamos a entrar en la semana decisiva y para empezar tenemos el Mortirolo, donde podré ayudar a Richar Carapaz. Es un puerto muy exigente y se notará la acumulación de fatiga. Hay que controlar de cerca a Nibali, es el rival. Conozco la subida y creo que nos podremos defender bien», señaló el ciclista alavés en la segunda jornada de descanso.

Landa aclaró que el Giro «no avisa y cualquier día puede ser bueno o malo», e insistió en que Nibali es el favorito porque su palmarés está adornado con cuatro grandes, si bien «Primoz Roglic es un rival muy fuerte». Las sensaciones de Landa han mejorado.