Nelson Semedo se quiere ir. Hace un año ya estuvo meditando con esa posibilidad, pero ahora, según ha informado Catalunya Ràdio, ha vuelto a trasladar ese deseo de abandonar el Barça a la directiva azulgrana. En Madrid, entretanto, Diego Simeone, el técnico del Atlético de Madrid, espera al lateral derecho, de 25 años, con los brazos abiertos tras la marcha de Juanfran y descontento como está con el colombiano Arias. Semedo tiene una razón deportiva para buscar su salida. Nunca ha sido una pieza imprescindible para Valverde.

COSTÓ 30 MILLONES

Llegó en el verano del 2017 al Camp Nou procedente del Benfica. Costó 30 millones de euros, con cinco millones más por los primeros 50 partidos con la camiseta azulgrana. Pero el técnico extremeño siempre ha colocado por delante a Sergi Roberto, sobre todo en los encuentros importantes. No ha tenido continuidad. O, al menos, no la que esperaba el propio Semedo, que ha visto como era la segunda opción.

LA OPCIÓN WAGUÉ

El Barça, sin embargo, se aferra a su cláusula de rescisión, fijada en 100 millones de euros, para impedir su marcha, por mucho que pudiera llegar a ser incluido en la operación Griezmann. Aunque por 50 millones sí podría dejarlo marchar, aunque a Valverde le crearía otro problema. El técnico no solo debería firmar a un lateral izquierdo para competir con Jordi Alba (Junior, el defensa del Betis, es uno de los candidatos) sino que tendría que contratar a un lateral derecho. A no ser, claro, que el técnico le abriera la puerta del primer equipo al joven senegalés Moussa Wagué (20 años), que ha debutado ya esta temporada en la última fase, con el título de Liga en la mano.