Lo peor que puede ocurrirle a un partido de fútbol es que el protagonista acabe siendo el colegiado, bien porque sus decisiones influyan de manera determinante en el resultado o bien porque demuestre una incapacidad manifiesta en la interpretación del reglamento. Pues ayer el árbitro Cuadrado López-Romero mostró unas carencias impropias de la Tercera División. Cierto es que no influyó en el resultado final (1-1) pero fue incapaz de manejar un partido que le vino grande. No hubo entradas violentas, ni juego duro y él sacó diez tarjetas amarillas y dos rojas. Siguió el encuentro desde la distancia y se fio de uno de sus jueces de línea que se equivocó una y otra vez, sobre todo en los ataque locales, lo que acabó por desquiciar al respetable y a los jugadores.

Es triste perder unas líneas para tener que darle protagonismo a quienes no debieran tenerlo, pero alguien debería poner remedio a tales desastres. En el colectivo arbitral extremeño hay colegiados excelentes, pero por desgracia aparecen elementos que bajan el nivel de manera extraordinaria.

En cuanto al partido en sí, el Jerez supo sacar partido a su experiencia y si encima tiene en sus filas a un jugador como Juanito de la Cruz, que fue un auténtico emperador sobre el campo, lo normal es que acabe llevándose premio. Él anotó los dos tantos de su equipo, pero aparte de eso fue el canalizador del juego de los suyos.

La primera mitad fue un despropósito. Ninguno de los dos equipos fue capaz de manejar el tiempo. El que primero erró fue el Plasencia, que en el minuto 8 ya pudo adelantarse por medio de Eric, que en un mano a mano con el meta Adrián este último supo despejar un balón que ya olía a gol.

Cuando parecía que con la igualada se llegaría el descanso, en la prolongación anotó el Plasencia tras un disparo lejano de Vitolo que despejó Adrián, Eric peleó en la línea de fondo y logró centrar para que Walter Navarro hiciera el 1-0.

En la segunda mitad, con el marcador a favor, los placentinos se hicieron con el control del esférico y tuvieron ocasiones en un disparo de Vitolo que se marchó fuera o en una excepcional arrancada de Nuno Damas que acabó en un centro al que no llegó compañero alguno.

En el 56 Juanito de la Cruz, siempre él, intentó una vaselina ante Marco, pero el meta atajó a una mano. El técnico local Daniel Simón realizó cambios que a la postre desarticularon a su equipo. Retiró a Motos, que estaba siendo de los más punzantes debido a su rapidez y a un incansable Mauri.

El Jerez se hizo entonces dueño de todo, del balón y de las ocasiones. En una de ellas consiguió el empate Juanito de la Cruz al aprovecharse de un rechace (min.73). Se quedó incluso con 10 el Jerez por la expulsión directa de Juanan. Con los jugadores placentinos inmersos en protestas y cabreos con el árbitro, quien impuso cordura, sensatez y paciencia fue el maestro Juanito de la Cruz, que anotaba el 1-2 en el 86 tras una elaborada jugada.

Aún pudo empatar el Plasencia en un rebote, pero el balón se marchó rozando el palo en el 93. Se llegó al final con sonada pitada al trío arbitral y comentarios generalizados en la hinchada incluso más veterana que no recordaba actuaciones tan calamitosas y tan perjudiciales para el propio fútbol como la de los trencillas de ayer en la Ciudad Deportiva.

up plasencia1

jerez2

3Goles: 1-0: min.45+, Water Navarro, 1-1: min.73, Juanito de la Cruz y 1-2: min.86, Juanito de la Cruz.

3Árbitro: Cuadrado López-Romero. Por el cuadro local, amarillas a Alejo, Vitolo, Álex Trujillo, Nuno Damas, Caco, Ricardo Carvalho y Caique. En los visitantes la vieron Sanse, Juanán y Carlos Arias. Rojas directas al placentino Caique (min.89) y al jerezano Juanán (min.77).

3Estadio: Ciudad Deportiva.

3Espectadores: 450.

3UP Plasencia: Marco, Caco, Álex Trujillo, Alejo, Walter Navarro (Ricardo Carvalho, min.75), Nuno Damas, Pablo Bueno, Motos (Caique, min.51), Mauri (Alfonso Bernal, min.64), Vitolo y Eric.

3Jerez: Adrián, Javichu, Carlos Arias, Pardo, Pablo Rubio, Galván, Jony (Javi Casero, min.25), Sebi (Juanán, min.62), Sanse (Arsen, min.81), Chema y Juanito de la Cruz.