Como la propia situación de España, que parece haber pasado de la pasividad al histerismo en apenas 48 horas, el deporte español y como consecuencia el extremeño también ha mutado en un lapso escaso de tiempo en su respuesta al coronavirus. Lo que el martes fue la decisión de disputar a puerta cerrada la mayor parte de las competiciones, fuesen profesionales o no profesionales, masculinas o femeninas, cambió ayer a una oleda de aplazamientos en distintas disciplinas deportivas.

Por ahora --y puede que esto sea solo cuestión de horas--, apenas soporta la decisión inicial de jugar sin público la Primera y la Segunda División de fútbol, con el Extremadura implicado en esta última en su partido en Elche. Esta mañana habrá una reunión clave para unirse a la corriente general de suspensiones. También las ligas de voleibol (con cuatro representantes extremeños en las dos Superligas 2) conservan la medida de no dejar acceder al público.

Todos los demás torneos fueron cayendo durante el día a la presión de los clubs protagonistas, que primero argumentaban problemas de salud que podían sufrir los deportistas y después, aunque más en voz baja, se lamentaban de los perjuicios económicos que les ocasionarían jugar sin poder hacer taquilla.

La batalla ganada el miércoles la inició el fútbol llamado ‘no profesional’, aunque sus protagonistas sí lo sean. Equipos de Segunda B como el Mérida y el Badajoz, que se iban a enfrentar en un desértico estadio Romano el próximo domingo --en lugar de hacerlo ante, quizás, 10.000 espectadores--, presionaron de lo lindo. Al principio la Federación Extremeña de Fútbol se resistió, apuntando a que se trataba de un mandato de las autoridades sanitarias, pero después acabó cediendo. No solamente lo hizo con la Segunda B, sino también con la Tercera, donde también había sentado como un puñetazo en la mandíbula tener que jugar a puerta cerrada las dos próximas jornadas.

La promesa es que, como sea, se buscarán fechas para recuperar estos dos fines de semana en los que no se jugará, en principio, aunque nadie puede prever cuál será la situación dentro de 14 días con el virus y su propagación. En el caso del grupo XIV extremeño, no será sencillo porque la mayor parte de sus futbolistas tienen otros trabajos y les costará disputar partidos entre semana, pero así tendrá que ser si se quiere ir cuadrando las fechas y llegar a tiempo a las fases de ascenso y permanencia.

La Federación Extremeña también suspendió las competiciones que organiza, como las dos de categoría senior que están por debajo de la Tercera y las de Judex, algo que hicieron baloncesto y balonmano. Rarísimo o directamente imposible será ver un partido de niños de cualquier deporte en la comunidad hasta entrado abril.

LA CIRCULAR DE LA JUNTA / Determinante fue un comunicado de la dirección general de Deportes de la Junta a las federaciones en el que recomendaba «el aplazamiento cautelar inicial de quince días de los eventos deportivos de carácter autonómico, en especial aquellos que carezcan de implicación clasificatoria».

«En el caso de que los eventos deportivos supongan una concentración superior a las 1.000 personas, la recomendación se convertirá en suspensión con carácter general», añadía.

Para las competiciones de ámbito estatal e internacional se remitía a la directrices del Consejo Superior de Deportes a las respectivas federaciones nacionales.

LOS DEMÁS DEPORTES / El propio baloncesto de las ligas superiores presentó durante el día la duda de si también aplazaría todo el programa. Tardó mucho, pero finalmente lo hizo. Primero fueron las competiciones organizadas por la Federación Española, que incluyen cuatro extremeños: el Cáceres Patrimonio de la Humanidad --que iba a recibir mañana a Lleida en la LEB Oro--, el Nissan Al-Qázeres --que iba a hacer lo mismo el sábado al Ensino Lugo en la Liga Femenina Endesa--, el Torta del Casar y el Adepla, estos dos últimos de la Liga EBA a los que les correspondía medirse respectivamente a Almería (fuera) y Martos (casa). Tampoco habrá fútbol sala, rugby ni el Campeonato de España de motocross que iba a ser en Malpartida de Cáceres.

Extraña lo que sucede con el voleibol, pero no se puede descartar que finalmente haya marcha atrás y que no jueguen ni Arroyo en la Superliga 2 femenina ni Cáceres, Pacense y Grupo Otero en la masculina.