La convulsión social que ha generado el coronavirus afectará a todo el mundo. Incluso a aquellos sectores que parecen fuera de la realidad y están "en una burbuja", como son los clubs de fútbol de élite. Así lo pronostica Vincenzo Spadafora, el ministro de Deportes de Italia, uno de los países más afectados del planeta, y el más castigado de Europa, con 10.779 fallecidos entre los 97.689 casos confirmados hasta este domingo.

"Los grandes clubes viven en una burbuja, más allá de sus posibilidades, comenzando con los salarios millonarios de los jugadores. Deben entender que nada después de esta crisis volverá a ser lo mismo", afirmó Spadafora en una entrevista concedida al diario La Repubblica. El ministro criticó los salarios millonarios de algunos jugadores de la Serie A y quiso subrayar que "el deporte no es solo fútbol". Spadafora pretende invertir 400 millones en el deporte de base de todo el país.

La Serie A salió a responder a Spadafora a través de su presidente, Paolo dal Pino, aunque consideraba que "no es el momento para generar controversia". Sin embargo, emitió un comunicado en el que subrayó que el fútbol representa el 1% del Producto Interior Bruto (PIB) del país, y que da empleo a 300.000 personas y no dejó pasar la oportunidad para subrayar que los clubs profesionales han desmpeñado "un papel reconocido como locomotora del sector", generando directamente 3.000 millones de euros cada año.

Dal Pino recordó que los pagos solidarios para instalaciones y fútbol juvenil fuera de la máxima categoría habían aumentado de 93 millones en el 2010 a 130 millones este año. "Los números hablan por sí mismos y no hay necesidad de agregar nada más para resaltar el papel de la Serie A de Lega en apoyo del fútbol base e, indirectamente, de todo deporte italiano".