El campeón de MotoGP, el catalán Marc Márquez (Honda), se ha puesto a prueba esta misma mañana, tras descansar durante todo el día de ayer, en el primer entrenamiento del sábado del Gran Premio de Andalucía, segunda carrera del Mundial-2020, que se celebra en el trazado de Jerez. Márquez, que ha dado 18 vueltas al circuito, ha parado el crono en 1.37.882 minutos, a algo más de un segundo del mejor tiempo, que lo ha conseguido Maverick Viñales (Yamaha, 1.36.584) y, por tanto, ya se clasificó para poder participar en la 'quali' Q1.

Tras ese ensayo, Márquez se reunió con el doctor Ángel Charte, máximo responsable médico del Mundial, que mantuvo la condición de "OK" para que el joven de Cervera (Lérida) pudiese seguir con su adaptación a la moto y, sobre todo, meditar, en compañía de los responsables japoneses del equipo oficial Repsol Honda, su manager Emilio Alzamora, su ingeniero Santi Hernández y, por su puesto, con el 'team manager' de la escudería campeón, el excampeón Alberto Puig, que siguieron muy atentamente la evolución física del ocho veces campeón del mundo.

Márquez, que se paseó por el 'paddock' de Jerez sin protección alguna, estuvo siempre moviéndose entre su camión vivienda, el boxe del equipo Repsol Honda, el camión del equipo en el que se cambia y hace las reuniones con el 'team' y, por descontado, en la clínica del trazado andaluz, donde se vio con su fisioterapeuta de confianza, Carlos García, que ya fue vital en su rehabilitación cuando se hizo, un invierno tras otro, las dos operaciones en sus hombros izquierdo y derecho.