74 - Basquet Girona: Albert Sabat (11), Kari Jonsson (9), Olaf Schaftenaar (5), Ryan Logan (16), Davis Rozitis (12) -cinco inicial- Robert Cosialls (4), Josep Busquets (5), Pedro Barral (-), Biram Faye (7), Gerard Sevillano (5). 

75 - Cáceres Patrimonio de la Humanidad: Roeland Schaftenaar (15), Ferrán Ventura (3), Fran Cárdenas (8), Sylvester Berg (15), Paco del Águila (3) -cinco inicial- Adrián Usó (-), Aitor Etxeguren (-), Raven Barber (10), Devin Schmidt (21). 

Marcador por cuartos: 22-20, 47-42 (descanso), 57-58 y 74-75 (final).

Árbitros: Morales García-Alcaide, García Crespo y Ávila Zurita.

Incidencias: Partido de la segunda fase (grupo de la permanencia) en la LEBOro. 600 espectadores en Fontajau.

Triunfo de prestigio y que puede valer la permanencia para un Cáceres Patrimonio de la Humanidad que en su visita a Fontajau y pese a las bajas sensibles (Jeff Xavier y Jorge Sanz), completó un gran partido ante el líder , el Basquet Girona (74-75). Los extremeños jugaron de tú a tú hasta el último segundo y a falta de 20 centésimas la fortuna también se alió con ellos pues el local Rozitis falló un tiro libre que hubiese llevado el duelo a la prórroga. 

Sin embargo, el partido puede haber dejado también la pésima noticia de la grave lesión de Fran Cárdenas, acaecida en el último segundo. A falta de las pruebas, no tiene buen aspecto y el base, que tiene un largo historial de problemas de rodilla, fue retirado de la pista entre lágrimas.

El partido comenzó con los hermanos Schaftenaar en el quinteto inicial de cada equipo y precisamente Roeland sería el gran protagonista de los primeros compases al encestar las dos primeras canastas visitantes, puntos que fueron respondidos con sendos encestes de Jonsson, el segundo con un bonito alley-oop tras bloqueo directo. Se deshizo entonces la igualdad, cuando los locales marcaron su primera alternancia con un parcial de 7-0 y remontaron (9-4 en el cuatro).

Roeland apareció al rescate con tres nuevas canastas (al final anotó las cuatro primeras canastas extremeñas) que sin embargo no sirvieron para poner de nuevo a Cáceres por delante, porque el partido se fue a la línea de tres y los especialistas locales exhibieron acierto con el segundo de Logan, más otro de Sabat y uno muy bueno por su lejanía de Busquets; mientras que Pedersen fue el único que acertó de tres por los visitantes (20-15 superado el minuto siete). De ahí al final los extremeños mejoraron mucho en defensa, Berg metió su segundo triple y el primer asalto terminó 22-20.

El segundo se inició con poco acierto de ambos desde el triple, pero también con un par de pérdidas verdes evitables que se dejaron sentir en el marcador (26-20 en el dos). La máxima de 6 se reeditaba y se mantuvo porque aunque Schmidt encestó de tres de seguido Sabat dio idéntica respuesta. Ahora los bases tenían mayor presencia y tanto Sabat como Cárdenas trataban de imponer un ritmo pausado y contenido, pero el electrónico se mantenía apretado. Hasta que otra canasta de valor triple de Del Águila colocaba una nueva máxima catalana (36-29 en el seis y tiempo muerto de Roberto Blanco).

De vuelta a pista se vio una jugada vistosa pues los rojos robaron en un 2+1 y cuando Sevillano se disponía a machacar el aro extremeño apareció Pedersen para ponerle un tapón espectacular. Pero no bastaba para sujetar a un Girona muy fuerte desde el triple, de nuevo Jonsson para el 39-30, y aunque el noruego aguantaba a su equipo también con puntos quedaba claro que el Cáceres necesitaba mejores argumentos para optar a la victoria ante un líder que sin jugar bien contaba siempre con el triple, ahora de Olaf Schaftenaar. El Cáceres apretó los dientes en defensa y con un juego ofensivo más coral sumó un parcial de 0-5 para colocar el 42-40 a falta de uno. Pero no tuvo un buen final de cuarto y el Girona le devolvió el parcial (47-42).

MÁXIMA EMOCIÓN /Parecía complicado que en la segunda el Cáceres aguantara el ritmo anotador de los de Carles Marco, máxime con las bajas de Sanz y Xavier, pero lo cierto es que durante los dos primeros minutos del reinicio nadie acertó con el aro. Entonces Del Águila enchufó un triplazo, Cárdenas otro más y Schmidt una de dos que significaban la remontada (47-50 en el cuatro y tiempo de un Carles Marco preocupado). De vuelta al juego su equipo por fin encestó y además se vio beneficiado por los problemas de un Del Águila que tuvo que pasar por el vestuario (52-52, min. 27).

El Cáceres defendía bien pero en ataque y aunque Ferran Ventura tomó la responsabilidad, no encontró el acierto y eso le impidió hacer daño a un Girona atascado que así y todo seguía contando con el triple con Sabat (57-54 a falta de dos). Pero el Cáceres atrás era una roca y tuvo premio. Al final 57-58 tras un triple de Schmidt.

Cárdenas saltó de inicio en el último acto para dar tranquilidad a un Ferrán Ventura voluntarioso pero negado cara al aro, y para reeditar su buena sintonía con el poste alto, en este caso Barber. Eso y la buena defensa extremeña eran claves porque el Girona no estaba fino arriba más allá de que Sabat volvía al triple (62-62 en el dos). Pero el choque ahora estaba muy cerrado, con muchas faltas y pocos puntos; y eso era el escenario perfecto para un equipo con el oficio del Girona, que apretó en defensa y secó a los extremeños en los siguientes cuatro minutos (70-62 a falta de cuatro).

Por fin a falta de tres Ventura metía un triple (1/10 en tiros de campo y 1/6 en triples). Una inyección de moral para un Cáceres que con un gran Schaftenaar en la pintura y otro triple de Schmidt le daba la vuelta a la tortilla (72-73 a falta de 39 segundos y tiempo muerto local). Con todo por decidir el Cáceres defendió muy bien y Cárdenas anotó los tiros libres. Sin embargo, con 72-75 y el reloj a cero Roeland se confundió gravemente y le hizo una falta de ‘premini’ a un Rozitis que optó a sumar un 2+1 que para suerte del Cáceres falló pues se le quedó cortísimo. Tras un largo viaje que empezó en Huesca, los extremeños vuelven felices por haber cosechado una victoria, pero muy preocupados por Cárdenas. El próximo viernes espera el Lleida en el Multiusos. H