La enfermería está siendo el gran caballo de batalla del Mérida esta temporada. Por eso, cuando parece que un futbolista puede dejarla atrás de cara al próximo partido, se toma como una gran noticia en el seno del club romano.

En el caso de David Rocha, hay optimismo con la posibilidad de que pueda entrar en la convocatoria de cara al trascendental partido del domingo (12.00 horas) frente al Atlético Baleares. Aunque todavía restan varias sesiones de entrenamiento, lo cierto es que el futbolista está entrenando con el resto de sus compañeros. Incluso, el club ha subido imágenes de la sesión del miércoles en las que se le ve haciendo ejercicios de fuerza y velocidad. Cabe recordar que cayó lesionado en el calentamiento del partido en el Nuevo Vivero, a la semana siguiente no estuvo disponible en el último partido de la primera fase frente al Villarrobledo y tras el parón de la competición a la semana siguiente, volvió a estar convocado en Majadahonda. Ese día el plan era que jugara algunos minutos en la segunda parte, pero la lesión de Gaspar a la media hora dio lugar a que tuviera que forzar más tiempo del deseado, lo que le produjo una microrrotura en el aductor.

PUERTAS ABIERTAS / A la espera de la evolución tanto de Rocha como del resto de lesionados (José Gaspar, Héctor Camps, Felipe Alfonso y Migue Garci) lo cierto es que la victoria de la semana pasada por 3-0 frente al Navalcarnero ha vuelto a poner la sonrisa en la plantilla emeritense, que no pierde de vista las dos plazas de de ascenso a la Primera RFEF. Es lo que dice abiertamente el portero titular, Javi Montoya: «estamos muy contentos, ya nos lo merecíamos. Teníamos muchas ganas de conseguir una victoria y se nos ha abierto otra puerta, así que vamos a Baleares con la máxima ilusión y a coger el último tren que nos puede dar opciones todavía para pelear por entrar en la Pro. El domingo es una finalísima y hay que ir a por ella».