1 - Dux Internacional de Madrid: Yelco Ramos; Expósito, Cortijo, Bonaldo, Mancebo (Rubén Ramos, m.61), Rabadán (Reguera, m.69), Villacañas, Moyano, Franco Márquez, Poley (Arribas, m.61), Barral (De Mesa, m.69).

0 - Extremadura: Casto; Enmanuel, Fran Cruz, Dani Pérez, Jilmar, Elías, (Lele, m.79), Toribio, Pastrana (Runy, m.75), Nico Hidalgo, Nando Copete (José García, m.63), Rubén Mesa.

Gol: 1-0: minuto 91, Rubén Ramos.

Árbitro: García Verdura. Catalán. Mostró tarjeta amarilla al local Rabadán.

Incidencias: Municipal de Villaviciosa de Odón. Sólo 150 espectadores como público local. No hubo venta de entradas para el público visitante por las restricciones de la pandemia.

Cruel, dolorosa e injusta derrota del Extremadura en Villaviciosa de Odón que pone muy en peligro sus opciones de jugar otra eliminatoria final por el ascenso a Segunda División. El gol de Rubén Ramos en el descuento, en el único disparo del Dux Internacional en todo el partido entre los tres palos de la portería azulgrana, rompió en pedazos el enorme partido cuajado por el equipo de Manuel Mosquera en términos futbolísticos. Por momentos, el Extremadura caricaturizó al Dux Internacional en su campo y lo barrió del mapa en fútbol y ocasiones. Quizá, el partido más arrollador en dominio de toda la temporada. Pero al Extremadura le está faltando gol. Mordiente. Dinamita en la parte final. Y lo está pagando caro. Ha dominado a los tres rivales del grupo en esta segunda fase, pero no ha ganado ninguno de los tres partidos. Y eso, de momento, lo saca del playoff

Hay algunas claves para encontrar explicaciones a la derrota, aunque sería injusto hacer sangre de un equipo que barrió a su rival durante 80 minutos, aunque no supo matar el partido y lo perdió en los instantes finales. Sin embargo, al Extremadura le falta gol. Y no por no tener buenos delanteros, sino por no disponer de recambios para presionar a los que no tienen el día de cara y darle otra marcha más al partido. Ni Rubén Mesa ni Nando Copete estuvieron certeros con el gol, pero el banquillo del Extremadura era desolador, tan sólo con José García como hombre del primer equipo y tres canteranos junto a un portero que ni ha debutado. Decía Daniel López Ramos, el hombre que confeccionó la plantilla, que no se podía decir que estuviera cogida con pinzas. Tal vez no, realmente está cogida con alfileres. Y eso está siendo un hándicap en la parte final de los partidos. 

Arrollador

El Extremadura salió al partido como nos tiene acostumbrados en el último mes: enchufado al máximo. Con una presión alta asfixió la salida de balón de un Dux que se vio sobrepasado en la primera parte con el juego y el trabajo del Extremadura.

Eso sí, el primer susto lo puso el Dux con un buen movimiento de Barral que abortó Jilmar en línea de gol cuando su pase buscaba un remate dentro del área pequeña.

El Extremadura acusó la falta de más efectivos en el banco y se acabó desinflando

Perdonó Rubén Mesa tras el primer cuarto de hora. Pastrana condujo una contra, filtró por dentro y, en el mano a mano, Rubén Mesa no superó a Yelco Ramos que le tapó abajo. 

Volvió a aparecer Pastrana por banda izquierda para sacar un centro preciso abajo que Nando Copete conectó y que el travesaño repelió para dejar el balón que se marchara a córner. Gran jugada. Falta de fortuna. 

El Dux trataba de despertar a cuenta gotas. Casto sacó bien una mano arriba en un disparo muy lejano de Bonaldo. Era sólo un pequeño paréntesis en una volcán de fútbol azulgrana. Nico Hidalgo estuvo a punto de marcar en un centro chut que sacó Yelco. Y Rubén Mesa remató desviado de cabeza con todo a su favor. El propio Rubén Mesa tuvo la última de la primera parte en una buena acción personal cuyo disparo lejano se marchó muy cerca del larguero de la portería madrileña. 

Monólogo azulgrana

Parecía haber dejado escapar vivo el Extremadura al Dux Internacional, pero el segundo tiempo no cambió ni de guión ni de escenario. De hecho, a los 45 segundos de la reanudación, una gran jugada entre Nico Hidalgo y Enmanuel acabó con un centro del africano al que Rubén Mesa no llegó por poco y al que Pastrana remató al poste por fuera. Otra gran ocasión desperdiciada.

El Extremadura, como si se tratara de un martillo pilón, no daba tregua al partido para lamentaciones. Pasado el ecuador del segundo acto, la más clara del partido de nuevo para Rubén Mesa. Fran Cruz pesca un remate arriba, Yelco rechaza y Mesa, dentro del área pequeña, no puede conectar el remate cuando se mascaba el gol. 

Cambios negativos

Esa falta de armario de la que tanto se habla en el Extremadura le penalizó gravemente ante el Dux. Manuel zarandeó el banquillo en busca de soluciones, pero Runy, José García y Lele no aportaron lo que precisaba el partido y el Extremadura, cansado por el esfuerzo, se fue consumiendo en el último tramo de partido. De esa circunstancia se percató el Dux Internacional, que no había olido la pelota ni de lejos hasta ese momento. 

Para el Dux, los cambios sí funcionaron. Arribas y Rubén Ramos encendieron el ataque madrileño y ellos cocieron el gol. Rubén Ramos agarró un balón en la frontal en el descuento y disparó entre una maraña de jugadores. El balón, tras tocar en el palo, se coló dentro, y dejó helado y sin reacción ante un Extremadura que no se podía creer un final tan tráfico de partido.