No va más en el estadio Emilio Macarro a partir de las 21.00 horas de este lunes. O Montijo o Cacereño sellarían el billete a la Segunda RFEF en el caso de triunfo. Con el empate todo quedaría pendiente del jueves en los partidos de los protagonistas ante Diocesano y Coria, respectivamente.
No podría haber más argumentos previos de relevancia para este duelo de ‘gallitos’ de la Tercera extremeña. Los dos favoritos llegan con la máxima ilusión para conseguir el objetivo lo más pronto posible porque a ambos se les podría complicar extraordinariamente el objetivo en el caso de no lograrlo a la primera. Todos lo saben: jugadores, técnicos, directivos y aficionados tienen la cita marcada en rojo para aprovechar la primera opción.
Habrá aficionados verdes, aunque en absoluto los que iban a desplazarse en una primera ocasión. La inoportuna presencia del covid-19 en la plantilla visitante confinó al Cacereño hace dos semanas, justo cuando se iba a disputar este partido, ya alimentado de morbo sin haber comenzado esta fase de clasificación. La falta de entendimiento entre los clubs para adelantar este choque al domingo ha impedido que el duelo generara mayor movimiento de aficionados y un horario y día más acorde con el acontecimiento deportivo.
El duelo táctico Juan Marrero-Julio Cobos adquiere caracteres especiales en este encuentro. El partido de la ida, con 1-0 para el CPC, constató la igualdad y la calidad de las dos plantillas. El césped artificial del Emilio Macarro medirá la calidad de los futbolistas, al tiempo que la adaptabilidad y el carácter. Desde las dos partes han mostrado su confianza y respeto ante el rival.
De momento, el Cacereño es el líder, pero un triunfo montijano dejaría a estos con el ascenso sellado, en tanto que los verdes se la jugarían con el otro equipo con aspiraciones, el Coria de Raimundo Rosa, ‘Rai’, el próximo jueves.
Las dudas
¿Estará físicamente bien el decano tras el confinamiento? En el equipo visitante confían en que así sea y que la solvencia demostrada durante el campeonato tenga continuidad en el que sin duda es el encuentro de la temporada. La derrota ante el Moralo y el empate ante el Coria en esta fase han despertado alguna duda, pero se espera que todo ello haya quedado olvidado.
Para Cobos, lo mejor es haber podido recuperar a futbolistas con problemas físicos, entre ellos Carlos Andújar o Alex Caramelo, dos de los jugadores con más talento de la plantilla que por diferentes razones habían estado entre algodones.
¿Salir a ganar con un juego ofensivo desde el inicio? No parece que ni Marrero ni Cobos estén pensando en esto a la hora de su planteamiento.
Y es que el desgaste de disputar otro choque determinante tres días después puede pesar en la táctica de cara a sus citas posteriores. Para el CPC sería en su casa del Príncipe Felipe ante el Coria y el Montijo ante un Diocesano que no se jugaría nada y que no podría arriesgar, ya que tres días después jugaría, ya con todo en liza, su duelo de máxima exigencia ante el Miajadas.
Paralelamente, en el estadio Príncipe Felipe habrá una convivencia de aficionados que no se desplacen a Montijo. Todos ellos querrán celebrar un ascenso convertido en una necesidad para el decano del fútbol regional, aunque también para los locales, cuyo proyecto se ha visto alimentado por un presupuesto alto para confeccionar una plantilla de primer nivel para la categoría.
