La asamblea de la Federación Extremeña de Atletismo ha aprobado, este jueves, las cuentas del 2020, que arrojan un déficit de 102.745 euros. El problema llega en que la territorial afirma que «los asambleístas y directivos actuales no son responsables de esa gestión, que pertenece a la federación anterior», se asegura en la cuenta de Twitter federativa. Esta consideración está reflejada en el acta.

En un duro hilo en la red social, la institución que dirige Antonio Campos asegura que los abogados federativos «tomarán las medidas oportunas ante los movimientos bancarios descubiertos y gastos realizados desde una tarjeta de crédito usada por el anterior secretario general con cargos que supuestamente no tienen relación con la gestión de una federación», en clara alusión a Pedro Talavera, secretario general de la directiva anterior presidida por Paco Carrapiso.

La federación de Campos afirma que «seguirá trabajando con el fin de dilucidar la situación que ha llevado a esta enorme deuda federativa y realizará todas las acciones que indiquen los abogados al respecto por el bien del atletismo extremeño».

Todo ello se desarrolla bajo una polémica que no ha cesado hace años.