Álvaro Martín / Atleta

Orgullo y frustración con la ‘medalla de chocolate’

«Todavía montamos una chocolatería». El llerenense optó por tirar de su particular humor para lamentar los tres cuartos puestos de la marcha española, uno de ellos el suyo en los 20 kilómetros. Su meritoria actuación en las calles de Sapporo no fue suficiente para obtener el podio, pero ya tiene entre ceja y ceja París-2024, los que serían sus cuartos Juegos Olímpicos.

Javier Cienfuegos.

Javier Cienfuegos / Atleta

Primera final olímpica, pero sin lograr diploma 

La satisfacción y la frustración se mezclan también en el montijano, que después de quedarse fuera a las primeras de cambio en Londres-2012 y Río-2016 con malas sensaciones consiguió por fin meterse en una final olímpica. En ella la siguiente meta era lograr como mínimo el diploma al que da derecho acabar entre los ocho primeros, pero solo logró lanzar el martillo a 76,30 metros, lo que le llevó al décimo lugar.

Cristina Cabaña.

Cristina Cabaña / Judoca

Una victoria contundente y una derrota previsible

La judoca emeritense estuvo en la línea de sus compañeros de equipo, que se volvieron sin llegar demasiado lejos en las eliminatorias. Cabaña, que competía en la categoría de -63 kilos, sí puede presumir de haber superado en primera ronda a filipina Kiyomi Watanabe con evidente contundencia (solo 38 segundos duró el combate), pero luego no pudo con la eslovena Tina Trstenjak, que terminaría siendo plata.

Miriam Casillas.

Miriam Casillas / Triatleta

Mejoría a nivel individual y décima en los relevos

La perspectiva realista para la triatleta pacense era poder mejorar su actuación de los Juegos deRío y lo logró con creces: si hace cinco años acabó en el puesto 43, esta vez fue vigesimoprimera, repitiendo además como mejor española. Sí que había más posibilidades de podio en los relevos mixtos, pero el equipo español estuvo lejos de lo esperado y ni siquiera pudo lograr el diploma con su décima plaza.

Jorge Campillo.

Jorge Campillo / Golfista

Una aventura apresurada y de difícil aterrizaje

Si a uno de repente, estando en la playa, le llaman por teléfono y le preguntan si quiere competir en unos Juegos apenas cuatro días después... ¿qué responde? El golfista cacereño, apresurado sustituto deJon Rahm, dijo que sí a sabiendas que era muy difícil que su actuación estuviese a la altura de su capacidad. Voló a Tokio, a un campo que no conocía, y terminó 59º de 60. Y lo hizo orgulloso.