1 - Mérida: Javi Montoya, Chirri Monje, Bonaque, Nacho González, Ebuka (Carmelo, min.83), David Rocha, Mario Robles (Gaspar, min.55), Artiles, Guille Perero (Álvaro Ramón, min.55), Higor Rocha (Aitor Pons, min.68) y Lolo Pla.

1 - Ceuta: Leandro, Alain, Capa, Carrasco, Jalid, Casais, Misffut (Ismael César, min.72), Luis Alcalde (Benji, min.82), Guzmán (Aisar Ahmed, min.67), Raíllo (Alberto Reina, min.82) y Pito Camacho.

Goles: 1-0: minuto 64, Lolo Pla. 1-1: minuto 69, Pito Camacho.

Árbitro: Expósito Jaramillo. Amonestó al local Mario Robles, y a los visitantes Capa, Guzmán, Raíllo e Ismael César.

Incidencias: Estadio Romano José Fouto. 1.800 espectadores.

El calor asfixiante que hizo en la mañana del domingo en la capital extremeña fue clave para el devenir del partido entre el Mérida y el Ceuta, que terminó con empate a un gol (1-1) en un choque bastante igualado, aunque el conjunto local fue mejor durante más tiempo, sobre todo en la segunda mitad.

Cabe destacar que Juan García, técnico emeritense, solo realizó una modificación con respecto a la primera jornada, dando entrada a Chirri Monje por Emilio Cubo en el lateral derecho, para darle un talante más ofensivo a la banda derecha junto con Guille Perero. Por la izquierda, como Ebuka no suele prodigarse, Lolo Pla caía mucho a banda para asociarse con Artiles.

La primera parte fue un acto de adaptación de los dos equipos a las altas temperaturas. Todo ocurrió en el centro del campo, prácticamente no se pisaron las áreas y tampoco hubo dominador claro del encuentro. Quizás el Mérida tuvo más la pelota, pero lo cierto es que lo más peligroso que se vio fue primero un disparo lejano del visitante Jalid tras el rechace de un córner a los cinco minutos y, por parte local, un cabezazo de Lolo Pla tras centro de Chirri Monje, que fue a las manos de Leandro. El resto fue mucha pelea y lucha en la zona central pero sin generar acciones de peligro por parte de ninguno de los dos, ni en jugada ni a balón parado. 

A los diez minutos de la reanudación, Juan García quiso mover el árbol poniendo en liza al once más ofensivo posible. Retiraba a Mario Robles, que tenía amarilla, y a Guille Perero, metiendo a Gaspar y a Álvaro Ramón. A partir de ahí, solo había tres defensas natos: Ebuka, Nacho y Bonaque. David Rocha se colocó como pivote por delante de los centrales, con una línea de cuatro por delante, con Gaspar y Artiles por dentro, y Lolo Pla y Álvaro Ramón en los costados.

Más peligro

La modificación táctica, y por ende, el mayor poblamiento de la zona ancha, hizo que el Mérida empezara a ser un equipo más peligroso y se vieron los mejores minutos locales. Como premio llegaría el gol de Lolo Pla. Un saque de banda, Higor Rocha lo cuerpeó de espaldas dentro del área para ponerla de cara hacia Gaspar, éste no le pegó del todo bien, pero por ahí rondaba Pla para poner la puntera y adelantar a los suyos.

Las buenas sensaciones refrendadas con el tanto no hacían presagiar el empate. Sin embargo, el Ceuta tiene un buen equipo a nivel individual, tal y como se vio en el gol del empate cinco minutos después. Un buen centro desde la derecha de Aisar fue rematado completamente solo por Pito Camacho, uno de esos delanteros a los que no se les puede dar un metro y la defensa del Mérida le dio varios.

Como era de esperar, el empate sentó bien a los visitantes y mal a los locales, que agradecieron la parada para refrescarse y para resetear ideas. Efectivamente, la vuelta al partido mejoró a los locales, que estuvieron muy cerca de marcar el gol de la victoria. Primero sería Carmelo. En el primer balón que tocaba, se acomodó el esférico dentro del área con un buen control y buscó el disparo a la escuadra larga poniendo el «uy» en la grada. También pudieron marcar los visitantes en una primera jugada que salvó Javi Montoya, tras un pase filtrado de Aisar que dio en un defensa frenando la pelota y gracias a que el cancerbero estaba muy atento para salir a los pies de Camacho para mandar a córner. Dicho saque de esquina terminó en un cabezazo del propio Camacho a las manos del portero.

La última ocasión estuvo en las botas de Gaspar, en un disparo desde el borde del área ante el cual tuvo que hacer una gran intervención Leandro, pues le botó justo delante, pero fue capaz de meter la manopla.

Al final, sabor agridulce para los locales, que entienden que fueron mejores durante más minutos del choque y tuvieron más ocasiones, pero lo cierto es que el Ceuta, a pesar de ser un recién ascendido, tiene un equipo con mucho empaque que ha demostrado que lo de la primera jornada no fue más que un accidente.

Juan García: “Sensación agridulce porque creo que hemos sido superiores”

El técnico del Mérida, Juna García reconocía al final del partido tener “una sensación agridulce, porque creo que hemos sido superiores en el cómputo del partido”, aún reconociendo que “en la primera parte hemos tenido poca profundidad, pero en la segunda hemos conseguido adelantarnos y la alegría solo nos ha durado cuatro minutos en el único error en jugada dinámica”. García también quiso darle las “gracias” a la afición “porque la hemos sentido”. Del Ceuta “me sigue pareciendo un equipazo que hoy ha cambiado muchas cosas”.

Por su parte, el entrenador del Ceuta, Chus Trujillo, valoraba el empate como “justo, en un partido típico de esta categoría. Al principio a ver quién imponía su juego, nos pudo la ansiedad de la primera jornada, pero al pasar de los minutos vimos el Ceuta que queríamos. Se han visto dos buenos equipos que van a jugar por cosas bonitas”.