Hacerse fuerte en casa es una de esas expresiones que se suelen utilizar antes de empezar todos los campeonatos como garantía de éxito para el objetivo que un club se pone en la temporada. Si el equipo sabe que va a luchar por salvar la categoría tendrá que hacerse fuerte en casa e intentar sumar lo que pueda a domicilio. Y si la meta es la de estar en la parte alta de la tabla, hay que hacerse fuertes en casa para estar arriba, porque no se pueden dejar escapar puntos. A este segundo grupo es al que quiere pertenecer el Mérida esta campaña, por lo que, según esta teoría, los emeritenses han dejado escapar los dos primeros puntos del campeonato después de empatar el domingo a uno frente al Ceuta. 

Si en otros tiempos al Romano se le definió como un fortín, con una afición que apretaba al rival y llevaba en volandas a los suyos, en las últimas tres campañas, a tenor de los resultados, el feudo emeritense ha ido perdiendo esa característica, ya que de los 27 partidos ligueros que ha acogido, el aficionado romano ha visto a su equipo ganar las mismas veces que perder, siete. Los trece encuentros restantes terminaron en empate. Es decir, de los 81 puntos en liza, los emeritenses solo han conseguido 34.

El cambio en la tendencia de los guarismos en casa en las últimas campañas es uno de los objetivos del club, en primer lugar, por los motivos clasificatorios obvios y, en segundo, para atraer al aficionado, que está deseoso de volver a ir al Romano a divertirse con su equipo. El debut en casa ha sido agridulce por el empate cosechado cuando iba por delante en el marcador, pero también hay que destacar lo complicado que está siendo para los equipos ganar en su propia casa. En la primera jornada solo hubo dos victorias locales. En la segunda han sido cuatro. Es decir, seis victorias en un total de 18 partidos.

Sirva como dato esperanzador para la parroquia romana que en la campaña 2007-2008 con la denominación de Mérida UD, el equipo entrenado primero por Fabri y después por Milojevic jugó el playoff de ascenso a Segunda A en un año en el que solo ganaron un partido de los seis primeros que se disputaron en casa.

El próximo domingo (18.00 horas), el equipo de Juan García vuelve a un escenario similar al de la primera jornada en Canarias, un campo pequeño de césped artificial de última generación, para enfrentarse al Vélez, que todavía no ha puntuado.