Entiende Julio Cobos el estado de euforia en el que puede estar colocada la afición del Cacereño después del pleno, nueve de nueve, sumado por el equipo en este inicio de temporada. Pero también tiene claro que, puertas adentro del vestuario, hay que controlarla, «porque esto no ha hecho más que empezar».

Dice el técnico del conjunto verde, que este domingo recibe al Coria (Príncipe Felipe, 12.00 horas) en el primer derbi de la temporada en Segunda RFEF, que en el vestuario trata de «ser lo más equilibrado posible y bajar los humos si alguno los tiene subidos». 

«Solo llevamos tres jornadas, queda muchísimo. Esto es fútbol y es muy cambiante y pueden llegar momentos malos», insiste repitiendo el mismo mensaje que ya lanzó el sábado pasado tras ganar 0-1 al Cádiz B, cuando aseguraba que el «nueve de nueve es anecdótico». «Hay que tratar de ser lo más realistas posible y seguir trabajando, que es la única fórmula para que este estado de forma perdure», apuntaba el preparador este viernes, durante la rueda de prensa previa al duelo contra el Coria.

Sin bajas llega el Cacereño a este primer derbi y tendrá Julio Cobos que descartar a cuatro jugadores este sábado. «Es un dolor de cabeza, no solo hacer el once, sino la convocatoria».

Con las habituales ausencias desde que empezó el curso sigue el Coria. No podrá contar Rai ni con Carlos García, un jugador con pasado en el Cacereño, ni con Pedro Toro. Sí está ya recuperado Juanjo Chavalés, que contra el Córdoba jugó algunos minutos. Con ganas de dejar atrás esa derrota, la primera de la temporada, llegará el conjunto celeste al Príncipe Felipe, donde, como ya ocurriera en mayo, tendrá el apoyo de un buen número de sus aficionados.