Solo habían pasado cuatro jornadas y el Mérida todavía no conocía la derrota y, sin embargo, tanto el entrenador como algunos jugadores reconocían que les hacía falta la victoria que habían terminado de cosechar en la Ciudad Deportiva Bahía de Cádiz con el doblete de Bonaque. Tanto el entorno como desde el propio club deberán analizar si no es contraproducente para la plantilla que temporada tras temporada el equipo esté jugando finales en octubre.
El caso es que esta vez la moneda salió cara y el equipo de Juan García se llevó una buena victoria, que además trajo la buena noticia de la vuelta a los terrenos de juego de Héctor Camps y los debuts con el primer equipo de los canteranos Johan Montes y César en los minutos finales del choque. Una alegría para la afición a la que le quiso dedicar la victoria el entrenador, porque "se han desplazado en unas condiciones climatológicas complicadas. Están siempre en las malas, así que ahora va por ellos”.
El triunfo vino como reflejo de que “hoy sí nos hemos encontrado en la fase ofensiva que veníamos reclamando en anteriores partidos”, reconocía el técnico emeritense. Curiosamente, en el encuentro en el que Javi Montoya ha tenido más trabajo y que ha sabido solventar para mantener por tercera jornada consecutiva, su portería a cero.
El equipo entrena lunes y martes para viajar por la tarde ese día a Soria donde juega el miércoles los dieciseisavos de final de la Copa Federación frente al Numancia (19.30 horas). Un torneo que “nos tomamos muy en serio y en el que vamos a darlo todo”.
El protagonista del partido fue Manuel Bonaque con dos goles de cierta similitud, pues ambos llegaron en una segunda jugada después de un balón parado en el que el central aparecía donde nadie lo esperaba. El propio Bonaque, que le dedicó los dos tantos a su futuro bebé, reconocía que no metía dos goles en un partido “desde infantiles” y explicaba que “ya necesitábamos esta victoria, porque el equipo se lo estaba mereciendo, llevábamos muchos empates con sabor agridulce, y darle las gracias a la afición que se ha desplazado a pesar de la lluvia, que también se lo merecen”.
