El Coria sale triunfante del Romano

Primer derbi extremeño en el Romano José Fouto y ha caído del lado cauriense (0-1). En un ambiente festivo para los locales llegaba el choque entre el Mérida y el Coria después de las dos victorias consecutivas, en liga y en Copa Federación, ambas a domicilio y con los aficionados romanos deseando ver la mejoría de su equipo. Sin embargo, lo primero que se han encontrado ha sido una primera mitad de dominio visitante que, sin poner en apuros la portería de Javi Montoya, lo cierto es que tuvo siempre el balón con criterio e hizo sentirse muy a disgusto al equipo de Juan García. Los de Rai, que llegaban de dos derbis con sendos empates, querían volver a la senda de la victoria, y el feudo emeritense se antojaba como un escenario perfecto para conseguirlo, apoyado por los numerosos aficionados celestes que se dieron cita.

Tan cierto es que Sergio Gómez y Deco, los dos medios centros del Coria, dominaron la zona ancha en el primer acto, como que el único disparo con cierto peligro fue del local Higor Rocha al que respondió perfectamente Diego Mirón. El dominio celeste nunca se vio refrendado en ocasiones claras, pues el Mérida lleva demostrando toda la temporada que aunque esté romo en la faceta ofensiva, defensivamente es un equipo prácticamente impenetrable. Tampoco aprovecharon ninguno de los dos las opciones a balón parado, así que los guantes pasaron desapercibidos.

Aprieta el Mérida

En la segunda mitad, la película fue otra. El Mérida salió con otro aire en busca de la victoria, mientras que en el Coria empezaron a destacar Mahillo y Rubén Alegre, los dos centrales, más Oliveira, que se puso por delante de ellos al salir en la segunda mitad. 

Uno de los futbolistas que más cambió su actuación de una parte a otra fue el local Álvaro Ramón, quien en la primera perdió todos los duelos con Chavalés y que a los cinco minutos de la segunda se inventó un quiebro para irse de su par y desde línea de tres cuarto mandó un zurdazo a la cruceta, siendo la mejor ocasión del partido. El Mérida seguía merodeando y en el minuto 55 sería Lolo Plá el que pondría a prueba a Mirón con una falta que el cancerbero despejó de puños.

Artiles fue el futbolista más destacado de los emeritenses, no solo por lo que crea, sino también por lo que corta cuando le toca estar en el doble pivote. Suyo fue el robo del que nació una gran jugada por la derecha, llevada por Guille Perero y completada con un disparo de Lolo Plá que dio en la espalda de Mahillo. 

La sensación es que los locales rondaban el gol y los visitantes aguantaban el arreón, hasta que a diez minutos para el final, Juanjo Chavalés tiene una falta directa al borde del área que ejecuta a la perfección por encima de la barrera, da en un palo, rebota en el otro y Pino, más vivo que la defensa romana, marca a puerta vacía.

Al Mérida le tocaba remar y al Coria guardar la ropa. Artiles volvería a probar fortuna tres minutos después, pero la gran ocasión la tendría Lolo Plá en el 87, en un polémico penalti que envió desviado. Derribo de Patxi Dávila sobre Mario Robles en el lateral del área grande que el colegiado ve dentro, aunque la sensación es que la falta se produce fuera. Las protestas caurienses supusieron la expulsión de Juanjo Chavalés, , por lo que los de Rai tendría que defender el resultado con uno menos. En la prolongación el Mérida también se quedó con diez por la lesión de Héctor Camps. Sin duda, además del resultado, la peor noticia para el Mérida es una nueva lesión de Camps, y otra vez por mala fortuna, pues se la produjo en el codo por una mala caída.