La temporada del balonmano extremeño ya está en marcha. Este pasado fin de semana ha arrancado la Segunda División Nacional Extremeña con seis equipos, donde el Balonmano La Garrovilla ha iniciado la defensa del título con victoria. Y el próximo sábado y domingo se jugarán los primeros partidos de Primera División Femenina, donde compiten cuatro equipos: EMD Aceuchal, BM Surocer Zalamea, Paideuterion y UB Pacense.

El actual campeón y favorito para revalidar el campeonato, el Balonmano La Garrovilla arrancó con un triunfo ante el Óptima Canónico Ciudad de Villafranca (25-20). Fue un partido serio e igualado hasta el descanso (13-13). Un comienzo arrollador de los locales en la segunda parte, con un Luna imponente bajo palos acompañado de un gran trabajo defensivo, permitía hacer un parcial de 8-3 que los de Carlos Cadaval no pudieron superar.

La Unión Balonmano Pacense, que esta temporada tienen a Nino Antúnez y a Raúl Caballero a los mandos, visitaba a un Cafetería Europa Balonmano Villafranca de reestreno tras un año de ausencia, presentando un conjunto muy joven. El duelo se saldó con victoria para los de Badajoz, 29-39, aunque los locales dieron la cara en todo momento y ofrecieron muestra de que serán un equipo competitivo en todos sus partidos. La nota negativa fue la lesión del jugador pacense José Ramos por una luxación de rotula que hizo que el partido estuviera parado más de 30 minutos por la actuación de las asistencias médicas.

Quienes también volvían a la competición tras no competir la temporada pasada en Segunda División fue el BM Dragones de Cáceres, que visitaron a UPPM Calamonte-Josefinas, que se  estrenaban en la categoría bajo este nombre, pero que cuentan con muchos jugadores con gran experiencia completado por jugadores juveniles y otros en su primer año sénior. Esta mezcla funcionó a la perfección y los calamonteños se quedaban los puntos (27-17).