Son las dos caras de la moneda del derbi que volará al aire este sábado (18.00 horas, Multiusos) entre el Alter Enersun Al-Qázeres Extremadura y Hierros Díaz Miralvalle Extremadura: Sira Hisado (Malpartida de Plasencia, 2-12-2003) y Alicia Morales (Plasencia, 28-4-1998) ejercen como bases ‘de la casa’ en sus respectivos equipos, aunque en momentos diferentes de sus carreras. Mientras Hisado se va abriendo hueco en la rotación de las cacereñas, Morales, más madura ya, es titular en el club en el que lleva toda la vida y en el que también empezó la chinata.

«Está claro que es un partido especial. He estado en el Miralvalle muchos años y va a ser bonito encontrarme en la pista con compañeras que he tenido», dice la directora de juego del Al-Qázeres, contenta con su papel hasta ahora. «El entrenador me planteó desde el primer momento que iba a tener minutos saliendo del banquillo y lo está cumpliendo. Estoy cogiendo experiencia y eso es bueno», añade.

Hisado dejó Plasencia por Cáceres hace poco más de cuatro años cuando era una promesa rutilante en categorías inferiores. En este tiempo ha seguido siendo dominante en cantera y hasta en Primera Nacional, pero ha tenido que lidiar con que su desarrollo físico no ha sido el esperado. «Creo que he avanzado mucho en este tiempo y que mi evolución ha sido buena. En cuanto a altura no he crecido demasiado, pero el baloncesto no se basa solamente en eso. Hay posiciones para todas», dice.

Sobre el partido en sí, lo prevé igualado porque «somos equipos parecidos. Nosotras desde luego esperamos ganar». «A nosotras nos falta un poco conocernos mejor porque el equipo es prácticamente nuevo», resume. 

Por último, reconoce abiertamente su admiración por Alicia Morales. «He entrenado con ella. Está jugando muy bien, destacando y teniendo minutos», apunta.

Capitana Morales

La propia Morales muestra su respeto por Hisado y las demás canteranas del Al-Qázeres... donde ella misma pudo acabar hace unos años, según asegura. «Algún interés hubo en su momento y se estuvo hablando», señala.

La capitana del Miralvalle vive estos días con emoción y hasta con nervios: ha jugado muchas veces en distintas categorías contra el equipo de Cáceres, pero no a un nivel tan alto como el de la Liga Femenina Challenge. «Es un partido totalmente diferente a todos. Somos los dos equipos extremeños con mucha rivalidad desde siempre, con muchos títulos en juego. Es como un Real Madrid-Atlético de Madrid. Se va a vivir muy intensamente», prevé.

Considera «una satisfacción para nuestro club poder enfrentarnos a ellas y ya ganarles sería sensacional». Y con el añadido de que no hay un favorito claro porque las placentinas han empezado un poco mejor (3-3 de balance por 2-4 de las cacereñas). «Con la lucha y la entrega que le ponemos siempre los dos equipos, vete a saber si no se decide por una canasta, como pasó en la Copa de Extremadura», pronostica.

Aunque hace apenas dos temporadas había dos categorías de diferencia entre ambos, los dos clubs han acabado convergiendo en sus formatos:un núcleo central de jugadoras de fuera complementado por chicas de formación propia. A Morales, que también entrena a niñas, le gusta, claro: «¡Es que somos dos clubs de cantera! ¿De qué te sirve tener un equipo si no les das oportunidades a tus jóvenes, a las que llevas rodando toda la vida? No les puede dar todos los minutos a las extranjeras».

Mientras, va cogiéndole el punto a la nueva liga. «Hay mucho nivel y a mí está claro que me está costando más porque los rivales son mejores. También tenemos que conocernos mejor entre nosotras. Llevamos tres derrotas seguidas, pero antes de empezar hubiésemos firmado ir como vamos después de seis jornadas», apostilla.