Está especialmente feliz este año Julio Cobos. Tanto que celebra que, contando con su etapa de jugador y las dos como entrenador, sume su décima temporada en el Cacereño. “Esto forma parte de mi vida y estoy muy contento”, llega a decir en su comparecencia previa al duelo ante el Melilla, compromiso que será el domingo a las 12.00 horas en el Álvarez Claro.
Pero para que se dé ese estado de ánimo el técnico del decano extremeño hay que tener en cuenta que puede que se vea influido por los resultados (es líder con dos triunfos) y porque, según dice, por la actitud y predisposición de sus futbolistas. Tanto como que, asegura, “cuesta mucho” hacer un descarte para este partido.
La ausencia por molestias del central Capa es segura ("está mucho mejor, pero vamos a darle otra semana"), pero ahora tiene que elegir a otro futbolista para que se quede en Cáceres. Ante el Navalcarnero el que se quedó fuera fue el mexicano Luis Telles, último en llegar. “La verdad es que cuesta mucho porque todo el mundo está muy bien, trabajando mucho. Somos 20. Es difícil ya incluso hacer ese descarte. No digo nada decidir un once porque todos están bien. Es complicado, pero es bueno para el equipo”, se jacta el de Valdehornillos.
“Estamos contentos porque el comienzo ha sido muy bueno. Y siempre, cuando se gana, evidentemente se facilita mucho el trabajo, el día a día, de la semana. La gente confía más en lo que hace y los resultados ahí están”, agrega.
Y el ambiente es el mejor, aduce, porque el desafío es claro: enfrente habrá otro equipo de la máxima exigencia. “Hay ganas de que llegue el domingo, de jugar un buen partido. Nos enfrentamos dos equipos que estamos en buena línea. A ver si nos traemos los tres puntos, como siempre”.
