El Periódico Extremadura

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BALONCESTO. LEB ORO

Cáceres: Un ‘killer’, sí. ¿Y ahora qué?

La llegada de Lysander Bracey supondrá un impacto en la plantilla, sobre todo en lo que se refiere al papel de Kaspars Vecvagars

Lysander Bracey, en acción en la liga colombiana. E. P.

El Cáceres Patrimonio de la Humanidad anunció el domingo por la noche el fichaje de Lysander Bracey, un escolta norteamericano de 26 años y 1,93 que procede de la liga colombiana y al que se espera este miércoles en la ciudad. En el comunicado no se daban detalles sobre si esto supondría alguna baja en la plantilla y de hecho el equipo prepara con aparente normalidad el partido del próximo viernes ante el Ourense. Pero resulta inevitable analizar qué puede suponer en la estructura de un equipo que hasta ahora está transmitiendo demasiadas dudas en su juego. 

Nueva pieza  con la etiqueta de cañonero

Alberto Blanco, director general deportivo, lo lleva asumiendo desde hace semanas: con la plantilla que ha disputado los ocho primeros partidos de temporada faltaba anotación, sobre todo en el juego exterior. Así es que recopiló una lista de jugadores que diesen el perfil de anotador capaz de generarse sus propias canastas, y de ella el escogido fue finalmente Bracey, que entraba en precio tras descartarse otras opciones más glamurosas. Es cierto que su experiencia internacional no pasa de competiciones como la venezolana y la colombiana, pero en ellas ha cumplido el papel asignado de opción prioritaria en ataque, con el tiro de tres puntos como mejor arma.

Blanco no trabajó las dos últimas temporadas con Devin Schmidt, pero su impronta de ‘killer’ cuando más quema el balón se ha demostrado difícil de borrar en el Multiusos desde que se marchó a Palencia. Ahora se espera encontrar a alguien similar. Al fin y al cabo Schmidt también era un gran desconocido cuando llegó a España para jugar en L’Hospitalet, de LEB Plata.

Vecvagars, ¿’degradado’ a la segunda unidad?

La llegada de Bracey deja en una posición controvertida a Kaspars Vecvagars, que el pasado verano fue fichado como teórico sustituto de Schmidt. El propio Alberto Blanco defendía públicamente que podía hacerlo incluso mejor, pese a que su papel en sus otros equipos de LEB Oro (Castellón, Lleida y Girona) había sido un jugador circunscrito a la segunda unidad. Su misión era salir del banquillo y revolucionar los partidos con tiros lejanos, casi siempre saliendo de bloqueo y pocas veces poniendo el balón en el suelo y librándose de sus pares.

Kaspars Vecvagars, en el partido ante Gipuzkoa. Carla Graw

Si se mantiene en el Cáceres, está enfilado a volver a eso porque como referente no está funcionando, pese a que su actitud siempre ha sido elogiada por su entrenador, Roberto Blanco. Promedia 8,3 puntos, pero con porcentajes bajos (29,2% en triples y 36,6% en tiros de dos). De hecho, en la victoria del sábado ante el BuenoArenas Albacete ya fue suplente, cediendo su puesto en el ‘2’ a Pablo Sánchez, consecuencia última de su terrible 0/8 ante el Cantabria. Por lo que se ve, y tras pasar un delicado problema a nivel personal, su confianza está bajo mínimos y no sería raro que fuese él mismo el que pidiese marcharse. 

Los otros jugadores que deben mejorar

La operación de Bracey también conlleva un mensaje implícito al resto de la plantilla y a la propia afición: al club no temblará el pulso a la hora de reforzarse si estima que los resultados están por debajo de lo esperado.

Particularmente, el rendimiento de Kaspars Vecvagars no es el único que está siendo cuestionado. Al alero Simas Jarumbauskas, que venía con la etiqueta de posible revelación de la LEBOro tras su convincente rendimiento en la liga de su país, Lituania, también se le pide más, sobre todo a nivel de concentración durante los partidos y en la propia dinámica dinámica diaria. Tampoco entusiasma por ahora Willy Isiani en el rol de ‘4’ abierto (26,7% en triples), aunque no sea tan determinante. 

Por último, preocupa la rodilla de Julen Olaizola, que ha disputado los últimos encuentros muy mermado. Por ahora aguanta, pero...

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