El Extremadura deberá coronar Piornal para buscar el primer ascenso

La escalada del nuevo Extremadura de Almendralejo empieza en el pueblo más alto de la comunidad: en Piornal. Allí tendrá que jugar el CD Extremadura su primera eliminatoria por el ascenso a Primera Extremeña ante el modesto CF Piornal, un equipo acostumbrado a grandes hazañas que defiende a un pueblo de 1.500 habitantes. La ida será el 16 de abril en Piornal y la vuelta una semana más tarde en el Francisco de la Hera.

Para los piornalegos es una oportunidad histórica de vender su territorio. Juegan en un coqueto estadio de césped artificial que tiene una grada muy pequeña. La misma, la ocupa siempre la peña Kamotxo Rabiakanes, un animado grupo de aficionados que le pone colorido y ruido a los partidos del Piornal en su estadio.

José María Cidoncha, entrenador del Extremadura, asegura que «ahora hay que tenerle respeto a cualquier rival porque todos tienen sus armas, aunque sí es verdad que una de nuestras preferencias es poder jugar un partido sobre césped y, en ese sentido, hemos evitado tener que jugar una eliminatoria en tierra». 

Jorge Prieto, presidente del CF Piornal, asegura que desde el club se encuentran «satisfechos y emocionados» con este emparejamiento histórico, pues el Extremadura, en ninguna de sus anteriores denominaciones, se había cruzado con el Piornal. 

El equipo del Jerte viste con los mismos colores (rojo y negro) que el actual Extremadura. Su emplazamiento geográfico les pone en dificultades para armar un equipo cada año, pues los inviernos en este municipio son duros por la adversa climatología de frio, lluvia y nieve. De hecho, este año estuvo a punto de no salir a competir, pero la nueva directiva se organizó y dio el salto. El favoritismo claro recae en el Extremadura, que además de tener mayor presupuesto, tiene la vuelta en el Francisco de la Hera. 

El Extremadura trabaja en la posibilidad de fletar un autobús para que sus aficionados, ya que la distancia con respecto a Almendralejo es de 200 kilómetros. Pese a ello, se espera que las peñas y seguidores más fieles no falten a la primera gran cita.