Una buena parte de los más de 800 espectadores que se dieron cita este martes festivo en el duelo entre el Valdebótoa y el Gévora nunca había visto este encuentro. 21 años después se produce este icónico derbi pacense, ya que enfrenta a dos de las ocho pedanías de la ciudad de Badajoz. La cita estuvo enmarcada en el Torneo de Feria de la localidad valdeboteña, que se celebra durante estos días. Allí, aunque la mayoría apoyaban al equipo local, también hubo una más que nutrida representación verdinegra que se desplazó a la localidad vecina, de le separan poco más de seis kilómetros.
Aunque se trata de un duelo no oficial, ha sido todo un fenómeno social entre estas dos localidades. Uno de los principales propulsores de esta iniciativa ha sido el presidente del Valdebótoa, Juan José González. «Es bonito volver a vivir esto. Yo lo viví de niño y quería que lo viviera la gente que hacía mucho tiempo que no lo vivía y gente que no lo había disfrutado nunca», explica.
A este encuentro no faltó representación institucional, ya que acudió el alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera acompañado por el concejal de Deportes, Juan Parejo. Esta cita histórica sirvió además para que se inauguran el césped, el sistema de riego y la iluminación del estadio. Después de dos décadas sin competir, el equipo amarillo regresó hace dos temporadas en mitad del difícil contexto de la pandemia en un campo de tierra. No obstante, desde la directiva se muestran muy satisfechos con el crecimiento que han experimentado durante todo este tiempo. «Soñamos con que el club pueda seguir creciendo. La afición está volcada y las empresas nos están apoyando», declara el presidente Juan José González.
El Torneo de Feria, que este jueves vive su gran final, tuvo en el primero de sus enfrentamientos a este clásico, a sabiendas de que podría suponer un importante espaldarazo a las arcas del club. «Pensamos que este podía ser un partido que hiciera una buena taquilla. Hacía muchos años que se disputaba y era un partido bonito, con rivalidad y emoción», comenta González.
Pese a que el Gévora esté una categoría por encima del Valdebótoa y lleve acariciando sin suerte el ascenso a tercera en los últimos años, esto no impidió que resultara un encuentro igualado que tuvo que decidirse en los penaltis, donde la suerte cayó de lado del equipo anfitrión. «Siempre ha habido rivalidad entre los dos equipos, pero ellos nos han ayudado mucho y tenemos muy buena relación. En el partido, la afición estuvo de 10», relata el presidente.
Futuro del pueblo
En la actualidad, en el Valdebótoa militan algunos futbolistas que resultaron importantes en el Gévora hace no muchas temporadas. La falta de un equipo de fútbol en el pueblo hizo que los jugadores tuvieran que buscar una ubicación distinta a su pueblo para poder seguir jugando. Por eso, desde la cúpula de la entidad pedánea se quiere hacer una apuesta de presente y de futuro para evitar que esto vuelva a pasar. A corto plazo no descartan buscar el objetivo deportivo de disputar una fase de ascenso que le permita pelear con la Primera Extremeña. Pero si hay un anhelo que tienen en este pueblo, es la cantera, donde ya han podido sacar dos equipos. «Queremos que los niños puedan disfrutar del fútbol en su pueblo y no se tengan que ir», expone Juan José González.
Tras 21 años, el derbi pedáneo se disfrutó a lo grande. Y ya muchos esperan que se pueda repetir pronto.