1 - Mensajero: Padilla; Óscar, Toboso, Sebas (Samu Ramos, min. 54), Morillo (Juanda, min. 65); Maxi (Malick, min. 54), Ruymán, Ale Martínez, Toty (Pirri, min. 82), Edu Salles; Borjas.
2 - Villanovense: Álex Lázaro; Hurtado; Javi Sánchez (Guille Campos, min. 70), Ángel Gómez, Manu; Relu, Mario González (Yimi, min. 70), Benji (Isra Cano, min. 67), Alberto Fuentes (Pajuelo, min. 67), Bermu (Facu, min. 54); David Aguado.
Goles: 0-1: minuto 25, Mario González, de penalti. 0-2: minuto 47, Alberto Fuentes. 1-2: minuto 78, Borjas, de penalti.
Árbitro: Fulgencio Madrid Martínez (colegio murciano). Expulsó en el Mensajero al segundo entrenador, Armiche Florido, en el 84. Amonestó a los locales Edu Salles, Ruymán y Óscar; y a los visitantes a Mario González y Facu.
Incidencias: Partido disputado en el estadio Silvestre Carrillo. Unos 800 espectadores en el regreso al reformado recinto del Mensajero.
El Villanovense se aprovechó de la mala temporada que está realizando el Mensajero para sumar tres vitales puntos (1-2) que le dan un buen salto clasificatorio, situándose en la zona media y confirmado su mejoría en las últimas semanas.
Más de 200 días después volvía el Mensajero a jugar en su estadio, el Silvestre Carrillo, su campo talismán, tras un largo peregrinar por la isla por las obras de sustitución del césped. A ese argumento se agarraba el colista del grupo quinto de la Segunda Federación, un equipo que todavía no sabe lo que es ganar esta temporada, e iniciar la reacción, aunque al final no le sirvió para nada, ante un Villanovense que supo aprovechar sus opciones y los errores de su oponente.
Salió buscando la profundidad el conjunto canario con varios acercamientos desde el inicio, basados en el desplazamiento largo y coger desprevenida a la zaga. Sin embargo, no pudo encontrar ningún rédito para sus intereses, ya que todas las ocasiones fueron bien resueltas por la defensa del Villanovense, que por su parte buscaba intentar elaborar algo más y madurar las opciones para poder marcar, siendo el que controló esta primera fase en muchos momentos.
El atacante Borjas se mostró como el referente principal para poder aprovechar esa idea de juego que tenían los canarios. Y a punto estuvo el delantero mensajerista de aprovechar alguna de esas en las que estuvo cerca de rematarla. Al cuarto de hora, un centro desde el costado derecho de Ale Martínez lo remató Borjas fuera, no muy lejos del marco.
La situación cambiaría totalmente en el ecuador de los primeros 45 minutos. Una pelota dentro del área por la que pugnan dos futbolistas acabó siendo decretada como pena máxima por el colegiado ante las protestas de la afición y jugadores rojinegros. Al final fue Mario González el que acertó a convertir ese penalti, poniendo por delante a los de Villanueva de la Serena en busca de tres importantes puntos que los alejaran de las posiciones de descenso.
El verse por debajo obligó a los de Yosu Uribe a dar un paso adelante con la intención de anotar para poder sumar y aliviar su delicada situación. Pero eso abría espacios en zonas de defensa. Y a punto estuvo de aprovecharla el Villanovense, algo que evitó el zaguero Óscar González, que lanzándose a ras de suelo y con la cabeza impidió que el remate de Samu Hurtado pudiera entrar.
Los últimos minutos antes del paso por los vestuarios nivelaron el juego entre los dos equipos, con alternativas en cuanto a presencia en campo contrario y varias llegadas, sin que ninguna de ellas se pudiera materializar.
El segundo tiempo
Tras el descanso una nueva alegría llegó para los de José González Gus. Fue al aprovecharse de un error en zona de medios de los palmeros y montar una contra que supo definir a la perfección Alberto Fuentes con un disparo cruzado ante el que nada pudo hacer Padilla, que había rechazado un primer remate.
Ese nuevo tanto en contra dejó muy tocado al conjunto canario, al que se le acumulaban las malas noticias, dejando muy minada su moral. Aun así y con los cambios introducidos por el técnico mensajerista, le dio nuevos bríos, yéndose arriba en busca de poder recortar. Cuando lograban superar a la zaga acababa apareciendo la figura de Lázaro, evitando que el esférico llegara a las mallas en los intentos tanto de Ruymán, como de Edu Salles.
El premio para esa nueva energía de la escuadra de Yosu Uribe llegó a falta de doce minutos para la conclusión, al convertir Borjas una pena máxima cometida sobre Edu Salles. Dejando para los últimos minutos la búsqueda de la épica, como habían hecho en la jornada anterior en la que lograron igualar en los minutos finales una desventaja de dos goles. Ese ímpetu con muchos efectivos arriba, ya que no tenían nada que perder, se lo hizo pasar mal al conjunto serón. Como muestra una pelota de Samu Ramos a la que Borjas no llegó por poco al anticiparse la defensa y enviar a saque de esquina. Al final, el Villanovense supo resolver todos los intentos de su oponente para llevarse los tres puntos a su bolsa, que se llena además con un buen puñado de tranquilidad.