Celéritas, la filial de comercio electrónico de SGEL, la empresa líder en distribución de revistas internacionales en España, ha colgado el cartel de ‘se vende’. Según indican fuentes financieras a El Periódico de Españala compañía trabaja con la firma de asesoramiento Óptima Corporate para buscar comprador entre los principales distribuidores logísticos del sector, como Nacex, Seur, MRW o Correos, entre otras. Según indican las mismas fuentes, los dueños han recibido ya las primeras ofertas, que valoran este negocio de comercio electrónico en unos 30 millones de euros. Celéritas es una de las empresas más jóvenes en el mundo del transporte y la logística en España, pues fue fundada en el año 2006 y desde entonces ha ido creciendo progresivamente al calor del comercio electrónico.

En total, Celéritas cuenta con más de 3.200 puntos de conveniencia en la Península Ibérica. En concreto, la filial de SGEL (que compró en el año 2012) ofrece servicios de distribución y almacenamiento conectando la tienda con el cliente en la última milla de la entrega. De hecho, el momento de lanzar esta subasta no es casual, pues la logística se ha convertido en uno de los negocios más interesantes para un variado perfil de inversores, desde especializados en el negocio inmobiliario hasta fondos de infraestructuras, ante el auge que ha experimentado en los últimos años y con ciertos cambios en los hábitos de los consumidores como consecuencia de la pandemia del coronavirus.

El nuevo gigante del reparto de prensa está participado al 65% por Boyacá y al 35% por SGEL

Esta es la primera operación corporativa que pone en marcha la Sociedad General Española de Librería (SGEL) desde su reciente fusión con Boyacá, líder en la distribución de prensa en España, que acaba de recibir el visto bueno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). La empresa resultante tras la fusión estará repartida al 65% por Boyacá, mientras que SGEL controlará el 35% restante. Paralelamente a este proceso de venta de Celéritas, Óptima Corporate trabaja para vender el negocio de distribución y edición de libros de SGEL, por el que pretende ingresar entre 15 y 20 millones de euros. En total, Boyacá y SGEL podrían llegar a obtener 50 millones de euros por estas desinversiones.

Condiciones a la fusión

Pese a recibir la autorización de Competencia, la fusión entre ambas compañías requiere cumplir con una serie de condiciones pues “la entidad resultante incrementa su poder negociador frente a los editores, puntos de venta y otras distribuidoras, y refuerza su capacidad y los incentivos para imponerles condiciones comerciales más perjudiciales. Asimismo, tendrá menos incentivos para mejorar el servicio e invertir en innovación”, justificó la CNMC a través de un comunicado. Sin embargo, el regulador destacó que “la operación contribuye a asegurar a medio plazo la sostenibilidad del negocio y la subsistencia de la red de distribución de publicaciones periódicas, especialmente en las zonas deficitarias”.

Entre alguno de los requisitos impuestos, impide a la nueva empresas empeorar las condiciones a los puntos de venta tradicionales en un período de tres años, tiempo en el que deberá respetar los contratos firmados para la distribución de prensa diaria, revistas y coleccionables. De esta forma, los contratos solo podrán renegociar las condiciones económicas y comerciales con los editores ante caídas superiores al 15% en sus ventas. Además, en caso de que la empresa de distribución ofrezca al quiosco la posibilidad de vender otros productos (tanto editoriales como de otra índole), el punto de venta no estará obligado a ampliar su oferta si no lo considera conveniente.

Ambas partes ya habían propuesto mantener las condiciones en la distribución de revistas como parte de los compromisos acordados para que Competencia diera luz verde a su fusión, pero la CNMC ha endurecido esta condición a todas las publicaciones periódicas. Cabe recordar que los números de ambas compañías se han visto resentidos ante el avance de la pandemia del coronavirus, especialmente en los meses más duros del confinamiento cuando grandes superficies y otros comercios permanecieron cerrados provocando una caída generalizada de difusión y ventas de la prensa diaria, revistas y coleccionables.

El gigante de la distribución de prensa

La fusión, anunciada en marzo del pasado año y cerrada a principios de este mes de enero, entre ambas compañías ha supuesto la creación de un gigante del reparto de prensa en España. Boyacá ya era líder en la distribución de prensa en España, tras la adquisición del Grupo Dima en el año 2013. Actualmente trabaja en 21.000 puntos de venta repartidos en 5.000 localidades en todo el país, repartiendo más de 2 millones de periódicos al día, según consta en su página web. Fundado por Urbano Villanueva hace casi seis décadas, el Grupo Boyacá ofrece también otros servicios de transporte local y de recarga de telefonía. Por su parte, SGEL fue fundada en el año 1914 por el grupo Hachette y es el principal exportador de revistas españolas en el extranjero. Está presidida por Eduardo Montes, expresidente de Siemens España y de la Asociación Española de la Industria Eléctrica (Unesa).  

La fiebre por la logística llega a El Corte Inglés

El Corte Inglés planta cara a los gigantes de la distribución con la puesta en marcha de su filial de logística. Según ha adelantado 'Vozpópuli', el grupo de grandes almacenes ha dado luz verde a este proyecto, en el que llevaba trabajando desde el pasado otoño. A través de la sociedad El Corte Inglés Logística Avanzada segrega todos sus activos logísticos (a excepción de los inmobiliarios) a esta nueva filial, abriendo las puertas así a proporcionar sus servicios a terceros. También pasan a esta filial los 3.500 empleados que trabajan en la logística de El Corte Inglés, sin que cambien sus condiciones laborales. Este movimiento refleja el potencial de crecimiento que tiene el negocio de la logística en España, donde los inversores están ganando terreno para aprovechar las ventajas del comercio electrónico.