El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dado luz verde para liberar de las reservas estratégicas de petróleo unos 180 millones de barriles, un movimiento de una escala sin precedentes con el que el mandatario quiere combatir la inflación. Biden va a hacer el anuncio este jueves desde la Casa Blanca y lo enmarca como una de las medidas para paliar el impacto de la guerra abierta por Vladimir Putin en Ucrania.

En noviembre, antes de que empezara la invasión rusa, Biden ya había acudido a las reservas estratégicas y liberado 50 millones de barriles. Luego en marzo, ya con el conflicto abierto y habiendo vetado la importación de energía rusa a EEUU como parte de las sanciones con las que busca frenar al Kremlin, liberó 30 millones más. Pero ahora escala el alcance y va a poner en el mercado estadounidense cerca de un millón de barriles cada día durante seis meses, un paso que la Administración dice que servirá como “puente” hasta que empiecen a verse los efectos del incremento en la producción nacional de petróleo.

Las reservas estratégicas de petróleo de EEUU tienen 568 millones de barriles y una nota informativa de la Casa Blanca ha explicado que los beneficios de la venta de los que se van a liberar ahora se usarán para reponer esas reservas.

 El precio del combustible se ha disparado en Estados Unidos, donde el precio de un galón de gasolina (unos 3.8 litros) se ha disparado hasta los 4.24 dólares de media (3,82 euros). En lugares como California el precio está rozando los seis dólares (5,4 euros) por galón.