El pacto de rentas que pretende el Gobierno para contener la inflación y al que están dispuestos a entrar -bajo ciertas condiciones- los agentes sociales no será inmediato. Así lo ve el secretario general de CCOO, Unai Sordo, que ha considera que "no es realista pensar que vamos a cerrarlo antes de otoño" y ha criticado la ausencia de propuestas concretas por parte del Ejecutivo para armarlo. La central ha movido ficha para marcar el terreno en una de esas patas de las negociaciones: los funcionarios y sus sueldos. CCOO ha convocado una concentración este jueves frente al Congreso de los Diputados para exigirle al Ejecutivo abrir las mesas ya y no esperar a la recta final de año para definir cómo subirán las 3,3 millones de nóminas del sector público.

"El Gobierno tiene que entender que buena parte del éxito o fracaso del pacto de rentas depende del Gobierno, debe formar parte de él. [...] La gran incógnita es qué pone encima de la mesa. Las rentas de 15 millones de personas [pensionistas, funcionarios, perceptores de subsidios, becas, etc] en España dependen directamente de sus decisiones", ha afirmado Sordo este lunes en rueda de prensa. Algunas de las medidas -o parte de ellas- con las que el Ejecutivo podría tratar de atraer a los agentes sociales al pacto las prevé anunciar el presidente, Pedro Sánchez, este martes durante el debate del estado de la nación, según adelanto su mano derecha y ministro, Félix Bolaños en una entrevista en El Periódico de Catalunya.

Ya a finales de marzo Sánchez invocó la necesidad de unos nuevos Pactos de la Moncloa para frenar la escalada del IPC. No obstante, patronal y sindicatos no acabaron entrando a ello con un acuerdo de salarios en el sector privado y parte del fracaso de esa negociación lo atribuyeron a la falta de implicación del Ejecutivo en la misma. Pues no estaban dispuestos ellos a ceder para alcanzar un acuerdo equilibrado en los convenios colectivos sin que el Gobierno interviniera en las rentas de otros sectores, vía ayudas o cambios fiscales.

Ahora el Ejecutivo vuelve a la carga, tal como quedó plasmado formalmente en la reunión en Moncloa la semana pasada, donde instó a alcanzar un acuerdo tripartito con horizonte 2025. En ese pacto de rentas, la patronal le ha pedido al Ejecutivo que explique cuál va a ser -en tanto que 'mayor empleadora de todo el país'- la subida salarial que les va a proponer. Y esa es la negociación que de desde las centrales más representativas entre los trabajadores públicos exigen abrir cuanto antes. Este lunes ha sido CCOO quien ha anunciado movilizaciones, Csif ha realizado ya acciones semanas atrás y UGT prepara las suyas.

Desde CCOO están dispuestos a aceptar un incremento salarial que no esté a la altura del IPC medio, tal como subirán las pensiones, por ejemplo, o como piden en el sector privado. Aunque para transar con ello exigen otras medidas, como la reducción de la semana laboral a 35 horas para todas las administraciones públicas, la generalización de la posibilidad de acceder a la jubilación parcial o anticipada o eliminar el mecanismo de la tasa de reposición para aumentar las futuras ofertas de empleo públicas y rejuvenecer así las plantillas.