La escalada de precios se ceba con algo tan básico como la alimentación, lo que ha llevado al debate público diferentes alternativas para reducir el tique de compra, como la bajada del IVA, un impuesto indirecto que varía desde el 21% de las bebidas alcohólicas al "superrerducido" del 4% del pan o la leche.

Tras décadas de estabilidad en los precios alimentarios, que sí se resintieron precisamente con la subida del IVA que se realizó en 2012, la escalada de precios está alcanzando niveles preocupantes como refleja cada mes el Instituto Nacional de Estadística (INE), que en agostó apuntó una subida de casi un 14%.

Y ante esta situación se han lanzado propuestas varias, desde la cesta de productos básicos a precios congelados hasta Navidad de la vicepresidenta Yolanda Díaz a la bajada de impuestos, en concreto del IVA, con la que han vuelto a insistir las patronales de distribución y que, de momento, ha sido rechazada por el Gobierno.

Pero, ¿qué parte del presupuesto que los españoles destinan a comprar alimentos y bebidas se queda en la recaudación del Estado? La respuesta cambia en función de los alimentos que compongan esta cesta.

Los alimentos "naturales" al 4%

El Impuesto de Valor Añadido (IVA) se rige por una ley de 1992, pero ha recogido varias modificaciones para los productos alimentarios.

La ley dice textualmente que se gravan al 4% el pan común; harinas panificables; leche natural, certificada, pasterizada, concentrada, desnatada, esterilizada, UHT, evaporada y en polvo; los quesos, los huevos, las frutas, verduras, hortalizas, legumbres, tubérculos y cereales, "que sean productos naturales según el Código Alimentario" que, curiosamente, data de 1967 y no define cuáles son los alimentos naturales.

Con el desarrollo legislativo se han incorporado alimentos a este IVA mínimo, como ocurrió con la norma de calidad del pan (2019) que con la nueva definición de pan común, que ya incluye panes elaborados con harinas distintas a la del trigo o integrales y de otros cereales, rebajó el IVA de todos estos del 10 al 4%.

El grupo general del 10%

"Los productos utilizados habitual e idóneamente para la nutrición humana o animal" se gravaban al 8% hasta la reforma de 2012, cuando se subió su tipo impositivo al 10%.

En este grupo entran por ejemplo el pescado y la carne; por eso, ante la subida del IPC se escuchan voces sectoriales que reclaman pasarse al "club" de alimentos básicos, como la Cooperativa de Armadores de Pesca del Puerto de Vigo (ARVI) que ha reiterado su petición de IVA superreducido del 4% para el pescado.

Alcohol y bebidas azucaradas al 21%

Las bebidas alcohólicas tributan al 21% -al igual que el tabaco- tras la reforma de 2012 con la que se subió tres puntos esta tasa.

Por su parte, las bebidas refrescantes, los zumos y gaseosas con azúcares o edulcorantes añadidos tienen esta misma tasa (21%) desde enero del pasado año.

Fue en octubre de 2020 cuando el Gobierno anunció que incorporaría al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021 la subida del 10% al 21% el IVA a las bebidas azucaradas y edulcoradas, una medida que se argumentó en la lucha para combatir la obesidad infantil y favorecer hábitos más saludables entre la población.