Iniciar con buen pie en el mundo de los negocios requiere madurez, buen acierto y sobre todo, tener muy claro todo lo referente a las inversiones y cómo hacer crecer el capital.

Es por eso que, en ocasiones, contar con un buen asesor financiero puede ser de gran importancia, sobre todo al invertir sumas en algún emprendimiento. En este artículo se hablará de los métodos más efectivos para rentabilizar cualquier operación y por supuesto, obtener el beneficio de consolidar cualquier empresa que se proponga.

Contactar a un consultor

Uno de los métodos más recomendables es optar por asesoría directamente con un consultor, precisamente porque cada caso es distinto. Existen ciertas firmas especializadas en brindar asesoría, con un equipo profesional calificado, como consultores financieros de OVB. Y esto se debe a una razón específica: al saber la importancia de tener un consultor financiero que conozca el plan de negocios detalladamente, será más fácil sacar la mayor rentabilidad a tu dinero.

Al obtener información de un experto, el solicitante podrá tener claro ciertos puntos, como por ejemplo si se trata de un negocio que generará ganancias a largo plazo, la relación coste-beneficio, e incluso si es posible recuperar el dinero en poco tiempo. Aparte, es la mejor manera de mantener en equilibrio los puntos claves de cualquier estructura financiera: rentabilidad, crecimiento a futuro, liquidez y situación fiscal.

Lo ideal es que el proceso de consultoría inicie desde el primer momento en que se ejecuta el esbozo del plan de negocios. Al empezar desde cero, es más fácil lidiar con ciertos aspectos, como una visión realista de la inversión inicial o los pasos a seguir para ver resultados a mediano plazo.

Solicitar préstamos rápidos

Si después de la etapa de asesoría el usuario descubre que no dispone del capital suficiente para emprender por cuenta propia, una alternativa es solicitar un préstamo.

Dependiendo de si dispone de los requisitos mínimos para procesar, puede tramitar la solicitud de dos formas: a través del Banco o por medio de un sistema de préstamos online. La ventaja de la última opción es que el tiempo de aprobación es mucho más rápido que si se tratase de medios tradicionales.

La mayoría de estos préstamos no tienen un margen intermedio, sino que suelen ser cantidades bajas, pagables en 30 días, por sumas de 300, 600 o hasta 1000 euros, o comprender cantidades más elevadas, de 40.000 euros en adelante, ideales para reformas, inversiones, o completar el monto inicial para formar un nuevo proyecto de negocios.

La principal ventaja es que solo se necesita de documentación mínima para tramitar este tipo de préstamos, por lo que solo basta con tener el DNI vigente, una cuenta bancaria en uso y ser ciudadano español mayor de edad. La desventaja es que los intereses pueden ser más elevados en préstamos tradicionales.

Es importante estar preparado siempre

Al igual que en otros aspectos de la vida, los negocios requieren de cierto grado de prevención para lograr los objetivos propuestos con éxito. Y por eso, una buena manera de estar preparado es acudir a los métodos tradicionales de previsión, como disponer de un fondo de reserva en caso de emergencias e incluso invertir en acciones rentables a largo plazo y así proteger el dinero.

Algunos expertos en asesoría incluso recomiendan estar atentos a mercados incipientes, ya que puede ser una buena manera de diversificar el margen de acción y con ello la posibilidad de ganar más dinero. También es de gran ayuda saber cuáles son los potenciales riesgos que enfrenta el negocio y qué hacer para mantenerse con el paso del tiempo.

Aunque tener varios planes de acción puede resultar agotador, no debe ser visto como una tendencia a esperar solo lo peor o temer siempre un escenario catastrófico. Antes, bien, es una buena manera de estar prevenido sin descuidar el presente financiero.

Equilibra siempre el riesgo y la previsión

Si bien es cierto que la impresión que genera el mundo de los negocios es que resulta prácticamente imposible de predecir, existen fórmulas eficaces para lograr el éxito y es posible ajustarlas según cada plan. Una de las más importantes es: si es la primera vez, lo mejor es que la inversión sea segura y predecible. ¿La razón? De esta manera los riesgos disminuyen considerablemente.

Por el contrario, las reglas pueden cambiar cuando se trata de personas con más experiencia. En este caso, como ya se conocen los altos y bajos del mundo de las finanzas y por supuesto, del mercado en el cual se invierte, es posible tomar decisiones más riesgosas para incrementar el capital. Así, las experiencias previas habrán labrado el camino al éxito.

Por último, es importante tener en cuenta que en el mundo de las inversiones no existen resultados a corto plazo. Es necesario ser paciente y, por supuesto, ser inteligente al momento de decidir.