Las entidades convocantes de la manifestación de este sábado en Barcelona han criticado duramente las cifras de participación ofrecidas por la Guardia Urbana, que ha tasado en 350.000 los asistentes a la protesta. "Es una vergüenza", ha calificado el vicepresidente de Òmnium Cultural, Marcel Mauri, en declaraciones a TV3. Los organizadores de la marcha se han mostrado contrariados por la diferencia entre los datos de participación de este sábado y los de la movilización del pasado 11 de noviembre del 2017, ya que consideran que ambas consiguieron llenar la calle Marina y que en esta última ocasión la policía barcelonesa ha rebajado a la mitad a los participantes.

Òmnium y ANC han señalado directamente al 'regidor' de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, como responsable del descenso oficial de asistentes y lo han atribuido a una motivación política. Mauri ha considerado "inadmisible" el uso instrumental que, según su parecer, ha hecho el dirigente del PSC-Units per Avançar del conteo de la Guardia Urbana y ha anunciado que pedirán explicaciones al respecto.

"Ya llevan una temporada", ha afirmado la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, en referencia a la cifra de asistentes que dio la policía barcelonesa sobre la manifestación del 11 de septiembre de este año o la de la huelga general del pasado 26 de octubre. "Empezamos a pensar que aquí hay una intencionalidad [...] A ver que cifra dan mañana, porque el PSC convoca mañana", ha declarado.