El juez de Instrucción número 31 de Madrid, Antonio Serrano-Arnal, ha empezado a investigar el encuentro entre el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, y la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, el pasado 20 de enero. Su primer paso ha sido pedir al Ministerio del Interior la normativa de funcionamiento del aeropuerto de Madrid-Barajas, donde se produjo la entrevista, así de llegada de pasajeros a la terminal madrileña, informaron fuentes jurídicas.
El magistrado, que al aceptar la inhibición del Juzgado de Instrucción número 47, asumió todas las iniciativas judiciales presentadas, la del PP y las querellas del partido Laócrata (la primera que se interpuso) y del Vox, todavía no dispone de las cintas, pero sí quiere determinar qué funcionarios de Policía estaban en el control de llegadas de Barajas cuando se produjo la cita.
La primera querella presentada, que también se interpuso en el Tribunal Supremo, que es donde únicamente puede ser investigado Ábalos por ser aforado, es la del partido Laócrata, cuyo representante legal había sido citado este jueves para presentar las cuentas que presenta en el Tribunal de Cuentas para fijarle la correspondiente fianza y así poder ejercer la acusación popular.
Esa denuncia se dirigía contra los funcionarios que estaban trabajando el día del encuentro. Por su parte, la de Vox aporta una novedad respecto las otras iniciativas judiciales políticas: incluye una declaración jurada del vigilante del seguridad que presenció el encuentro.
