Las tensiones en el Gobierno de coalición han quedado en un discreto segundo plano ante los frenético movimientos políticos de las últimas dos semanas. Pero siguen ahí. PSOE y Unidas Podemos llevan meses en una escalada de roces internos y acusaciones cruzadas a costa del cumplimiento del acuerdo de legislatura que firmaron Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Este jueves, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, ha querido dejar bien claro a sus socios que el pacto se está cumpliendo, pese a que los morados les acusen de no respetarlo.
"¿Sabe usted lo que es el pacto? Estar ahora mismo discutiendo cómo va a ser la ley de vivienda. Coger cada norma y sentarnos a hacerla", ha explicado la dirigente socialista en una entrevista en RNE. En concreto, en el seno del Ejecutivo se está produciendo una fuerte choque por la regulación de los alquileres, recogida en el acuerdo de legislatura, que los morados quieren incluir en la citada ley de vivienda y que los socialistas rechazan. No obstante, Calvo ha señalado que "los contenidos del pacto en muchas cuestiones están por decidir" y que, además, hay que tener en cuenta que el PSOE tiene 120 diputados y Unidas Podemos solo 35.
Sin embargo, en materia de vivienda, el texto establece en el apartado 2.9.3 la puesta en marcha de "medidas normativas necesarias para poner techo a las subidas abusivas de precios de alquiler en determinadas zonas de mercado tensionado" mediante la creación de un "Sistema Estatal de Índices de Referencia de Precios del Alquiler de Vivienda". Además, en octubre, socialistas y morados reafirmaron su compromiso de poner tope al precio los alquileres en "zonas tensionadas", tanto en contrato nuevos como ya existentes, que incluso podrían tener que bajar.
Nuevas dinámicas
A partir de la próxima semana, en la dinámica interna del Gobierno habrá cambios. Iglesias abandonará la vicepresidencia segunda el martes, tras la reunión del Consejo de Ministros, y será la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, la que asuma el liderazgo del sector morado del Ejecutivo como vicepresidenta tercera. Calvo, preguntada por su relación con la política gallega, ha señalado que "en lo personal es buena siempre" y ha subrayado la importancia de no implicar "tus relaciones personales con tus discrepancias políticas".
Aun así, la convivencia en el Gobierno podría complicarse tras la marcha de Iglesias y su sustitución al frente del ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 por Ione Belarra. La actual secretaria de Estada es una de las voces más críticas con los sociales -principalmente con Margarita Robles- y quien está dirigiendo las conversaciones con el ministerio de Transportes, en manos de José Luis Ábalos, para aprobar la ley de vivienda.
Pese a estos roces, Calvo ha defendido este jueves que no habrá elecciones nacionales antes de 2023, cuando marca el calendario. "La legislatura llega al 2023", ha sentenciado tras destacar que la elaboración de los Presupuestos para el 2021, la recepción de los fondos europeos y la elaboración del plan de recuperación que van a presentar a Europa hace inviable pensar en un adelanto electoral.
