Pablo Casado advirtió en febrero que ni él ni sus compañeros volverían a dar “explicaciones sobre ninguna cuestión pasada” sobre los escándalos de corrupción del PP y este jueves ha cumplido su palabra. Veinticuatro horas después de que el juez haya imputado a la exsecretaria general de su formación, María Dolores de Cospedal, en el caso Kitchen por los delitos de cohecho, malversación y tráfico de influencias, el líder del partido se ha negado a responder preguntas de la prensa. Y lo ha hecho en un contexto en el que los periodistas han sido abucheados por algunos de los asistentes al acto por haber planteado esta cuestión a Casado en lo que se suponía que era una rueda de prensa. Al negarse a contestar, el líder de los conservadores también ha sido aplaudido por esos simpatizantes.

Ha ocurrido en Ceuta, adonde se ha desplazado Casado este jueves para mantener una reunión con el presidente de la ciudad, Juan Jesús Vivas, tras la llegada de miles de inmigrantes marroquís hace dos semanas. Los periodistas estaban convocados a una rueda de prensa al aire libre, cerca del Palacio Autonómico, y, cuando ha llegado el momento de plantear las preguntas, después de una larga exposición del líder del PP, se le ha dirigido la primera cuestión sobre la imputación de Cospedal. Varias personas han elevado la voz y se han quejado de que se le haya planteado ese asunto y no inquietudes sobre Ceuta. “Estoy bastante de acuerdo con esos caballeros”, ha llegado a decir el presidente de los conservadores tras dejar que los simpatizantes se explayaran. “Yo dije hace cuatro meses que no iba a hablar de cuestiones que no me corresponden valorar, que nada tienen que ver con mi responsabilidad como presidente del PP ni mucho menos con las preocupaciones que ahora tienen los españoles y la necesidad de soluciones que hoy hemos venido a aportar”, ha respondido Casado entre aplausos de esas mismas personas.

La segunda pregunta sobre la exsecretaria general también ha sido recibido igual. "¡Venga, ya!", "Fuera, hombre", se ha podido escuchar. "Respeto muchísimo que insista, pero de verdad que mi compromiso con los valores que representa el PP en su servicio público siempre van a estar vinculados a hablar de lo que yo puedo valorar y lo que a mí me corresponde valorar y no de cuestiones de las que no tengo ninguna información", ha afirmado. Para Casado es un mal trago sentirse lastrado por los escándalos de corrupción que heredó y, más, en este caso con Cospedal, ya que la exsecretaria general le ayudó a convertirse en presidente del partido gracias a su apoyo en las primarias.

La dirección del PP ha emitido a los pocos minutos un comunicado diciendo que no se trataba de militantes del PP sino que eran "ciudadanos anónimos que se han parado a presenciar las intervenciones" de Casado y Vivas.