Los tres grupos de izquierda y Vox, la oposición al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, han abandonado este jueves el Pleno de la Asamblea de Madrid después de que la presidenta del parlamento autonómico, Eugenia Carballedo, censurase al PSOE para evitar críticas y menciones al hermano de la jefa del Ejecutivo madrileño.

Los socialistas, así como Unidas Podemos y Más Madrid, llevan varios días denunciando que el hermano de Ayuso es uno de los receptores de contratos "a dedo" y "sin publicidad" firmados con la administración madrileña. En el Pleno de este jueves, la izquierda ha vuelto a cargar contra la presidenta regional y el intento de la presidenta de la Asamblea de frenar las críticas ha provocado el enfado de la oposición, que ha dejado vacía la Asamblea de Madrid.

La diputada del PSOE Carmen López estaba en el uso de la palabra en el pleno monográfico sobre las contrataciones del Gobierno durante la pandemia cuando ha indicado que el hermano de Ayuso se dedicaba "a ir por los hospitales a sugerir a las unidades de contratación a qué empresa hay que contratar". Con solo esta mención, la presidenta de la Cámara, María Eugenia Carballedo, ha pedido a la diputada que retire sus palabras por acusar a un familiar de otro miembro de la cámara y usar "palabras feas" para hacerlo.

López, desde la tribuna, se ha negado. La presidenta ha vuelto a llamarle la atención y le ha pedido que abandone la tribuna primero y la Cámara después, una vez que desde allí la diputada ha seguido discutiendo y defendiendo su libertad de expresión. Tras su negativa y con el revuelo formado en los escaños, la presidenta ha invitado a los servicios de la Cámara a acompañar a la socialista fuera del hemiciclo. Este último gesto es el que ha provocado el plantón definitivo de todos los grupos, incluido Vox, que han abandonado su sitio y se han agolpado en los pasillos hasta que uno por uno, todos los portavoces han comparecido para criticar lo sucedido.

Juan Lobato se encontraba fuera de la Cámara cuando han sucedido los hechos, pero ha salido respaldado por casi todos sus diputados para denunciar su firme "repulsa" por lo que consideran una censura falta de libertad parlamentaria. En la misma línea se han pronunciado las dirigentes de Más Madrid, Mónica García, o las de PodemosCarolina Alonso y Alejandra Jacinto.

No es la primera vez que las indicaciones de la presidenta de la Cámara no son bien recibidas por la oposición, que en varias ocasiones ha acusado a Carballedo de actuar como dirigente del Partido Popular y no como representante de todos los diputados de la Asamblea. De hecho, en esta línea se ha pronunciado Vox, que ha anunciado que presentará un escrito para pedir que les aclaren cuáles son los límites de la libertad de expresión de los diputados madrileños. Monasterio se ha mostrado ofendida porque entiende que los límites a los insultos solo se ponen cuando afectan a los miembros populares y, sin embargo, no se toman medidas cuando en la cámara a ellos les llaman "nazis" o se meten con sus familiares.