Mientras el Gobierno sigue apostando por el rearme de Ucrania para hacer frente a la invasión de Rusia, con un nuevo envío de armas, su socio de Podemos pone todo el foco en la vía diplomática, lo que divide de nuevo al espacio morado por el respaldo de Yolanda Díaz a esta nueva remesa de material militar.
Una vez más se ponen de relieve las diferencias dentro del Gobierno de coalición sobre cómo abordar este conflicto en el corazón de Europa, que cumple casi dos meses, y también dentro de Unidas Podemos porque de nuevo, la vicepresidenta segunda y posible candidata a liderar ese frente a la izquierda del PSOE en las próximas elecciones, Yolanda Díaz, ha vuelto a apoyar esta segunda entrega que va camino de Ucrania, con 200 toneladas de material militar.
Sin dejar de lado "la diplomacia y la paz", Díaz ha respaldo sin titubeos a Sánchez al afirmar que la invasión rusa es "una agresión absolutamente ilegítima que vulnera el derecho internacional" y, por tanto, ante situaciones como esta "los pueblos tienen derecho a la legítima defensa".
Un mensaje completamente diferente al que ha lanzado la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que en ningún momento contempla el rearme como alternativa.
Por eso, este viernes han organizado en Madrid una conferencia europea por la paz a la que han asistido dirigentes de izquierdas de otros países europeos, entre ellos el exlíder laborista Jeremy Corbyn, donde el mensaje más repetido ha sido la necesidad de presionar a todos los gobiernos para que la vía del diálogo y la diplomacia se impongan y que mandar más armamento a Ucrania solo conduce a alargar el conflicto y a ocasionar "más dolor y más muertes".
Las críticas al camino que ha elegido la Unión Europea, a la que algunos asistentes han tachado de "aprendiz de la OTAN" han sido generalizadas, también por parte de Belarra, que, eso sí, ha evitado la confrontación directa con el Ejecutivo del que forma parte a pesar del enorme desacuerdo que tienen en esta cuestión.
Y a esa llamada que ha hecho Belarra de "apostarlo todo a la diplomacia", la ministra de Defensa, Margarita Robles, le ha respondido con ironía al desear suerte a la líder morada para que "convenza a (Vladímir) Putin de que pare la masacre".
Para Robles, estas "observaciones en abstracto sobre la paz están muy bien", pero a quien tienen que convencer es a Putin, insistiendo en el "compromiso inequívoco" de España con los ucranianos.
Si el primer envió de armas a Kiev decidido por Pedro Sánchez causó una fractura importante en el Ejecutivo de coalición, que logró después reconducirse, este segundo no ha tenido una respuesta tan dura como entonces por parte de su socio morado, aunque éste insiste en que la única vía para lograr un alto el fuego inmediato es la del diálogo.
Esta guerra, que cumple 58 días, solo terminará -ha dicho Belarra- de dos maneras: "Con una internacionalización del conflicto entre potencias nucleares de consecuencias absolutamente imprevisibles o con un acuerdo de paz a través de las vías diplomáticas".
Aunque el secretario general del PCE y secretario de Estado para la Agenda 2030, Enrique Santiago, no ha intervenido en esta conferencia, ha arremetido también contra la UE por estar "financiando a Rusia y financiando la guerra", por un lado, con la compra de gas a Moscú para mantener el conflicto y, por otro, comprando también armas a EEUU para igualmente mantener la guerra.
En todo caso, Santiago comparte la idea de buscar una solución diplomática, defendiendo que lo que necesita Europa es un sistema de seguridad "compartida y mutua que evite este conflicto".
