La convocatoria urgente de la ministra Portavoz, Isabel Rodríguez, y el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, para revelar que Pedro Sánchez y Margarita Robles fueron espiados en 2021 pilló a Unidas Podemos por sorpresa. Igual que al resto de la ciudadanía española. El ala morada del Gobierno no sabía nada. Nadie les informó sobre los informes del Centro Criptológico Nacional sobre las intervenciones de los teléfonos móviles del presidente del Gobierno y de la ministra de Defensa. Tan solo unos minutos antes de que empezara la rueda de prensa, cuando todo el mundo hacía cábalas sobre su contenido, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, fue informada del contenido de la misma, aseguran fuentes de su entorno.

Cada vez más, suele ser habitual en la coalición que Unidas Podemos se entere de ciertas cosas prácticamente a la vez que el resto del país. Sin embargo, esta vez molesta especialmente en la formación morada al haber sido uno de los principales partidos espiados por las llamadas 'cloacas del Estado'. Los socialistas han avisado minutos antes de la rueda de prensa a la líder de los morados en el Ejecutivo sobre el anuncio que iban a hacer.

"Toda mi solidaridad con las personas espiadas y el Presidente del Gobierno", ha publicado Díaz en su cuenta de Twitter sobre las intervenciones que sufrió Sánchez en su teléfono móvil en mayo de 2021. La vicepresidenta ha asegurado que "es vital que la investigación vaya hasta el final y se depuren de manera ágil y efectiva responsabilidades". Fuentes de su entorno especifican que hacía referencia a aquellas personas que no han evitado el espionaje al jefe del Ejecutivo. Además, ha apuntado que "es obligación del Gobierno garantizar la seguridad. La ciudadanía merece respuestas".

En la misma línea ha apuntado la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, que ha dejado claro que "venga de donde venga, el fallo es inasumible" y que resulta "imprescindible depurar responsabilidades", dice la ministra.

"La información revelada por el ministro de Presidencia muestra una profunda brecha en la seguridad del Estado. [...] Está en juego nuestra democracia y la confianza de la ciudadanía", ha sostenido en Twitter.